Situación de corto plazo:
Moderados descensos en la renta variable española, en un comienzo de una semana en la que no nos sorprendería asistir a una fase de cierta consolidación de parte de los últimos y verticales ascensos, que serviría para aminorar parte de la elevada sobrecompra acumulada tras alcanzar la zona de resistencia y objetivo que manejábamos de los 11.000-11.200 puntos, por encima de los cuales no habría resistencia digna de destacar hasta los 11.650-11.885 puntos, que son los altos del año 2015 y el objetivo que valorábamos desde que el pasado mes de diciembre el Ibex35 (IBEX.MC) lograra batir resistencias de 9.360 puntos.
Por el momento no vemos ningún signo de agotamiento que plantee un techo sostenible en el tiempo y, de hecho, para que podamos favorecer el comienzo de una consolidación en próximas sesiones lo primero que tenemos que ver es un cierre que pierda los mínimos de la jornada anterior, siendo los últimos los que marcó el Ibex 35 en los 11.036 puntos.
Mientras no veamos evidencias técnicas que sugieran la posibilidad de ver un techo a corto plazo no podremos descartar incluso alzas adicionales que lleven al Ibex 35 en su versión Total Return (IBEXID.MC) hasta la resistencia creciente que mostramos en el chart adjunto, que está a un 1,17% del último cierre y que es la que debe superar para que podamos hablar definitivamente que el índice con dividendos entre en subida libre absoluta.
Situación tendencial:
La tendencia bajista que definía el Ibex 35 desde abril de 2015, fecha en la que se aproximó a los 12.000 puntos, ha encontrado suelo en la zona de los 7.600 puntos. Los objetivos que buscábamos inicialmente en los 10.000-10.250 puntos ya han sido alcanzados y ahora el siguiente objetivo que buscamos de cara a los próximos meses se localiza en el origen de la última tendencia bajista, esto es, la zona de los 11.885 puntos. Para que se ponga en jaque este escenario alcista que manejamos es necesario que se pierdan soportes que presenta el Ibex 35 en los 10.377-10.200 puntos.