Sarah Jessica Parker ya tiene tienda... pero no en NY
Nuria Hernández
Las fans de Sexo en Nueva York y del estilo de la inigualable Carrie Bradshow están de enhorabuena. La protagonista de la serie más fashion de la historia de la televisión ha anunciado a través de su perfil de Instagram que este jueves abrirá su primera tienda de ropa.
Curiosamente, y aunque todos podríamos pensar que así sería, Sarah Jessica Parker, todo un icono de la ciudad de los rascacielos, no inaugurará su primer negocio en este estado, sino que su negocio estará localizado en una de las zonas comerciales más lujosas de Washington, MGM National Harbour.
"Después de muchos viajes a Washington DC para visitar las instalaciones en construcción, reunirnos con los diseños y diseñar una colección muy especial, abriremos nuestra primera tienda física de SJP", ha comunicado la actriz en su red social.
"La gran inauguración será el 8 de diciembre. Estoy contando las horas, los minutos y los segundos hasta que abramos oficialmente las puertas", añadió Parker, que ya contaba con una tienda online dedicada en exclusiva a vender zapatos con su firma de la mano de Nordstrome y con un parecido más que razonable a sus adorados Manolos que tanto popularizó en la serie de HBO.
En la boutique SJP se pondrán encontrar también sus colecciones de calzado, pero además, las fans de la mítica intérprete podrán adquirir bolsos, complementos de lujo y vestidos muy del estilo Bradshow.
Desde 2014, Sarah Jessica ha añadido a su cuenta corriente las ganancias obtenidas por su firma de zapatos, pero también de perfumes y ropa de lujo. Su papel en Sexo en Nueva York la convirtió en una de las mujeres más influyentes del mundo de la moda y, desde entonces, todo lo que se pone se convierte en objeto de deseo.
Es habitual verla con diseños de creadores de Alta Costura (entre sus favoritos están los modelos de Victoria Beckham) y son famosos sus modelitos en la gala MET que se celebra cada año en Manhattan, pero también es normal verla en vaqueros anchos, botas UGG y maxi jerseys de lana llevando a sus hijas al colegio o haciendo la compra en el súper como cualquier madre trabajadora.