La escena tuvo lugar durante una cena benéfica organizada por la Fundación Querer, a la que asistieron numerosas personalidades del mundo de la comunicación, entre ellas, Cristina Tárrega y Óscar Cornejo, reconocido productor vinculado al universo de La familia de la tele y, anteriormente, al programa Sálvame. Aunque no compartieron mesa durante el evento, el verdadero foco de atención llegó después de la cena. Según nos comentan, Tárrega, íntima amiga de Ana Rosa Quintana, se acercó expresamente a Óscar Cornejo para mantener una conversación que no pasó desapercibida. La tensión flotaba en el ambiente, ya que es de dominio público la escasa simpatía —por no decir abierta animadversión— que existe entre el entorno de Unicorn (productora de Ana Rosa y de programas como Vamos a ver, Fiesta o TardeAR) y el universo Sálvame, del cual Cornejo fue una figura clave. De hecho, testigos presentes en el evento aseguran que, antes de entrar al recinto, Cristina Tárrega manifestó su intención de aprovechar cualquier oportunidad ante las cámaras para arremeter contra La familia de la tele. Incluso mostró interés en que se le preguntara por ese tema en el photocall previo al acto, cuando tuvo contacto con los reporteros que acudieron a cubrirlo. Finalmente, y pese a su insistencia, los periodistas no consideraron oportuno abordar el asunto, y ella se quedó con las ganas de dedicarles uno de esos comentarios ácidos tan característicos de su estilo. Cuando por fin se produjo el esperado encuentro entre Cristina Tárrega y Óscar Cornejo (exmarido del actual alcalde de Barcelona), varios asistentes se mantuvieron atentos a sus gestos e intercambio de palabras. No hubo signos evidentes de reproches ni confrontación abierta, pero tampoco se percibió cordialidad, complicidad ni simpatía entre ambos. Fue, más bien, un intercambio cargado de tensión contenida, con la diplomacia mínima necesaria para no montar un espectáculo público. El episodio, breve pero significativo, ha generado todo tipo de interpretaciones en el sector, especialmente por la curiosa coincidencia de ambos en un evento con fines solidarios. Una conversación que, sin necesidad de levantar la voz, habló alto y claro sobre viejas rencillas, egos heridos y cuentas pendientes en el mundo de la televisión. Cristina Tárrega, además de periodista, contertulia y empresaria, es esposa del exfutbolista Mami Quevedo y mantiene buenas relaciones personales con algunos directivos de alto nivel de Mediaset, además de con su amiga y "jefa", Ana Rosa.