Paz Padilla se rompe al recordar a su hermano una semana después de su muerte: "La vida me clavó de nuevo las uñas"

La presentadora atraviesa un momento complicado tras la muerte de su hermano Luis, al que estaba muy unida. No se han hecho públicas las causas del fallecimiento pero sí sabemos que fue inesperado para todos los suyos, a los que dejó sumidos en un profundo dolor. Este martes, Paz Padilla ha compartido con sus seguidores cómo se encuentra tras esta terrible pérdida, que se suma a la de su madre y su marido: "No me puedo dejar arrastrar por la tristeza, pero mi corazón llora como Cádiz hoy", comienza. "Sé que tengo que recordar con amor, que tengo que empujar mi gran molino, pero la vida de nuevo me clavó las uñas y cada vez lo hace más profundo".

Por desgracia, la humorista conoce bien el duelo y sabe que, a pesar de la alegría con la trata de recordar a los suyos, siempre hay momentos de tristeza: "Sé por dónde tengo que transitar, agarrarme a su amor, a los 55 años que pasamos juntos de felicidad y buenos momentos". Y responde a las críticas recibidas en los últimos años por 'celebrar' con una sonrisa la vida de los que se marchan en vez de llorarlos de la manera más tradicional: "Muchos pensáis que porque me río no lo amaba, pero os aseguro que él era alegría, como doña Lola, nuestra gran fuente de sabiduría", dice en referencia a su madre.

Por último, Paz finaliza: "Como ella, me volveré a levantar y oiré acordes de una trompeta en mi corazón, y sé que me vas a volver a sacar del agua antes de que la marea me arrastre, como hiciste cuando era niña. Te quiero, mi hermano del alma. Avanza".

La noticia de la muerte de Luis pilló a la actriz en Barcelona, desde donde se trasladó rápidamente a su Cádiz natal para acompañar a la familia. Todavía desde allí, Paz ha rendido un sentido homenaje a su hermano al tatuarse una trompeta, el mote que tenía y el nombre del chiringuito que regentaba en Zahara de los Atunes. No lo ha hecho sola: su sobrina la acompañó en ese momento. "Unidas no solo por su amor, sino también por la fuerza que nos va a impulsar a luchar, a cruzar este desierto de pérdida tan grande. Sabemos que él así lo quería, que nos decía una y otra vez 'La vida es corta y hay que disfrutarla'. Hoy oigo de nuevo las palabras que pronunciaste en la iglesia, en su último adiós. Me las he tatuado en mi corazón. Tan madura y tan llena de generosidad ante una pérdida tan inesperada. ¡Estaría muy orgulloso de ti!", ha escrito Paz sobre su sobrina. "El dolor se vive de muchas formas, pero tú me reafirmas en que las lágrimas no nos deben cegar. Que vivamos sonriendo y recordando con alegría y agradecimiento. Desoír a quien dice que lo que no entiende, no debe existir. Las dos sabemos que nuestro amor por él era inmenso, como el que sé que tengo por ti. Esta trompeta nos une a los tres, nos abraza y nos cuidará. Te quiero mi niña".