Las impactantes confesiones de Cristina Pedroche sobre la maternidad y el postparto: "Dabiz me dijo que necesitaba terapia"

"Estoy emocionada", ha admitido Cristina Pedroche con los ojos llorosos al coger el micrófono. Acostumbrada a convertirse en noticia por su particular vestimenta mientras recita las doce campanadas en la Puerta del Sol, la de Vallecas se estrena en el mundo editorial con Gracias al miedo, un desnudo literario que poco o nada tiene que ver con el que ofrece cada noche del 31 de diciembre.

Esta vez, Cristina va más allá. A través de 221 páginas, la mujer todoterreno que todos conocemos deja sobre el estante de cualquier librería su mayor miedo: no lograr ser una buena madre. "El problema de la maternidad es que vienen todos los miedos de golpe", ha admitido la estrella de Atresmedia este jueves en la presentación de su primer libro. En su debut como escritora, Pedroche habla sin adornos sobre el postparto y reconoce los miedos que siente tras el nacimiento de su hija Laia. "Cuando nació intenté que no viniese mucha gente a verme porque no me sentía cómoda. Todavía me siento muy vulnerable porque no quiero que nadie coja a la niña", ha confesado.

Para digerir el cambio que supone ser madre, la presentadora recurrió a la terapia gracias a su marido Dabiz Muñoz, que le animó a dar ese primer paso. "Dabiz me dijo que necesitaba terapia", ha manifestado. Y es que, la periodista y el chef llevan juntos una década, tiempo suficiente para compartir hasta terapeuta. "Le dije a David que quería una sesión con su psicóloga. Hablé con ella y me dijo que no había problema. No suele coger parejas, pero entiende mi miedo de exponerme a otro terapeuta", ha señalado.

Aunque la mañana de Pedroche ha consistido en hablar de los entresijos de su nuevo libro, la modelo también ha sacado tiempo para aclarar que Dabiz ha sido un sostén en este nuevo proceso. "Dabiz es un compañero increíble en todos los aspectos. Cuando lo conocí, sabía que iba a ser mi persona para siempre. Mis miedos por mucho que estén, él no podía solucionarlos. Bastante paciencia tiene. Estoy muy agradecida y cada día más enamorada de Dabiz", ha sentenciado.

Tras hablar de los suyos y reconocer que todavía lidia con demonios que le gritan que no es suficiente buena madre, Cristina confiesa: "Me encantaría volver a parir. Nunca me he sentido tan poderosa".