La nueva novia de Bigote Arrocet pertenece al círculo londinense de los Aznar: comparten yoga y retiros espirituales

El nuevo y jovencísimo amor de Bigote Arrocet sigue copando titulares. Esta vez no es por su relación con el humorista chileno ni por su trabajo en las pasarelas sino por el círculo de amistades con el que se codea en Londres: ni más ni menos que los Aznar. La hija del ex presidente del Gobierno y su marido, Alejandro Agag, comparten aficiones y espacios con Marta Pawlowska, que organiza retiros espirituales y de bienestar a través de su propia empresa.

La joven polaca es una mujer todoterreno. A sus 28 años, presume de una gran carrera en el mundo de la moda, un puesto directivo en una empresa de producción de petróleo y gas y hasta ha fundado su propia empresa, con la que desarrolla su lado más espiritual. Marta organiza retiros espirituales exclusivos en destinos exóticos y hoteles de lujo que cuentan con actividadades como yoga, reiki y meditación, entre otras actividades. Ana Aznar es asidua a este tipo de ocupaciones y la conoció como una clienta más, pero su relación pronto dio paso a una amistad a la que pronto se unió también su marido, Alejandro Agag, tal y como han desvelado en el programa de Ana Rosa este lunes.

Marta y Edmundo se conocieron hace ya un año gracias al hijo del chileno, Maximiliano, un reputado arquitecto en la ciudad inglesa. Muchos han apuntado a un montaje por parte de Bigote Arrocet pero su círculo lo desmiente: "Hay muchos tipos de relaciones, sí que son novios, relación a distancia, aunque se ven más de lo que la gente piensa", aseguran. Y afirman: "Ella es una enamorada de España, viene mucho a Mallorca e Ibiza y está aprendiendo el idioma".

Marta tiene 28 años, 46 menos que Bigote, y es de origen polaco. Su noviazgo con el chileno está muy afianzado, tanto que él ya conoce a los padres de su chica y hasta habrían hablado de pasar por el altar. De familia acomodada y con su propio apartamento en la ciudad británica, Marta es una mujer "emprendedora y exitosa". Se trata de la primera relación oficial de Edmunto tras su ruptura con María Teresa Campos, con la que protaganizó una escandalosa separación en la que tomaron parte las hijas de la comunicadora, Terelu y Carmen Borrego.