Casas Reales

Charlene de Mónaco se refugia en Córcega

  • La princesa se relaja con sus hijos, Jacques y Gabriella


La esposa del príncipe Alberto ha encontrado en la isla francesa su paraíso particular, donde disfruta de una vida tranquila con sus gemelos.

Toda princesa necesita un respiro. Charlenne ha viajado hasta Córcega para disfrutar de unas tranquilas (y largas) vacaciones al lado de sus hijos, los gemelos Jacques y Gabriella. La nadadora sudafricana pasó prácticamente todo el verano en la isla francesa, donde ha encontrado su paraíso particular, y sólo ha pisado el Principado dos veces en los últimos cuatro meses para atender compromisos oficiales.

Charlene y los niños, que han viajado acompañados por dos guardaespaldas, fueron fotografiados dando un tranquilo paseo a orillas del mar, según recoge la revista alemana Die Aktuel. Sonriente y relajada, la cuñada de Carolina disfruta de la isla y hasta allí se desplaza algunos fines de semana su marido el príncipe Alberto, al que su apretada agenda no le permite estar con sus hijos todo lo que le gustaría.

Los monegascos están contentos de que su princesa vuelva a sonreír aunque según se ha publicado en diferentes medios preferirían que lo hiciera en casa. Las continuas estancias de Charlene en Córcega empiezan a irritar a su pueblo, dicen en la prensa local, aunque aseguran la tranquilidad en palacio, donde Carolina que, según se comenta, no se lleva muy bien con su cuñada, vuelve a campar a sus anchas mientras deshoja la margarita de su posible reconciliación con Ernesto de Hannover.