Reportajes
Nascar: historia de una carrera con sabor americano
En Europa no termina de entenderse la emoción de dar vueltas a un circuito oval, pero en Estados Unidos la Nascar es un campeonato al que, en cada carrera (y son más de treinta las que componen el certamen) no menos de 50.000 personas acuden dispuestas a contemplar un gran espectáculo.
Uno de los asiduos visitantes ilustres de las carreras de la Nascar es Tom Cruise, para quien este tipo de competiciones no resultan nuevas, ya que el actor personificó hace algunos años a un piloto de Nascar en la película Días de trueno.
En realidad hay diferentes categorías de la Nascar, aquí no estamos hablando más que de la división de honor, donde más de 60 pilotos pueden llegar a correr en la temporada, pero en cada carrera únicamente los 43 más rápidos en los entrenamientos pueden tomar parte en la misma.
Este año, Jimmie Johnson ha conquistado su cuarto título consecutivo con unas ganancias superiores a los siete millones de dólares, lo que le sitúa en el tercer puesto de la clasificación histórica de la máxima división de la categoría. Ahora, Johnson sólo tiene por delante a otros míticos pilotos de la especialidad: Richard Petty, TheKing, que añade a sus siete títulos más de 200 victorias parciales, y Dale Earnhardt, que también ganó siete campeonatos.
La 'LeySeca'
En todo caso se trata de un curioso campeonato que nació en la época de la famosa Ley Seca norteamericana. Los traficantes de alcohol utilizaban a expertos conductores y mecánicos que modificaban automóviles para soportar el gran peso que debían llevar en sus maleteros. Estos conductores tuvieron que desarrollar destreza en la conducción para evadir a la policía sobre todo cuando sus automóviles iban totalmente cargados.
Con el tiempo empezaron a reunirse en trazados ovales de tierra para competir entre ellos y muy pronto estas competiciones atrajeron la atención de más gente y la popularidad subió hasta que Bill France, promotor de la carrera de Daytona International Speedway (el primer gran óvalo asfaltado) unió a los involucrados principales en la primera asociación de automóviles de serie.
Así comenzaba lo que hoy conocemos como la Nascar en 1947. Dos años después llegó Daytona, una de las pistas más importantes de la Nascar con sus famosas 500 millas y un trazado de 4 kilómetros donde se alcanzan las mayores velocidades.