Mercedes E Coupe 350 CDI BlueEFFICIENCY: un tipo elegante con toques divertidos
Mercedes-Benz ha decidido recuperar la versión coupé de su exitosa Clase E. De momento, prescinde del CLK, que derivaba de la anterior Clase C. El nuevo deportivo de la estrella ha ganado en empaque, elegancia y también en deportividad. Equipado con el brillante motor diésel tope de gama, un V6 que desarrolla 231 CV de potencia, se muestra un compañero de viaje cómodo para dos personas, pero capaz de ofrecer al conductor momentos de diversión en carreteras de curvas.
El interior del coupé es igual que el de la berlina de la que deriva, por lo que conserva sus virtudes -como los muy buenos ajustes- pero también sus defectos, como puede ser una sensación general de calidad que sigue sin convencer y por debajo de la de rivales como Audi o BMW.
Un interior con clase
Una de las cosas que más llama la atención es su falta de espacio. La postura del conductor es buena, pero la altura al techo, incluso en la posición más baja del asiento, es bastante justa. Un conductor de más de 1,80 metros entrará demasiado justo. El espacio es incluso más escaso en la parte de atrás, con poco hueco para las piernas, aunque compensa con una distancia al techo aceptable.
De lo que no se puede quejar el conductor y el copiloto es de los asientos. Es el mejor elemento interior con diferencia. En la unidad de prueba eran, además, refrigerados (expulsan aire por unos pequeños agujeros), un lujo de reciente incorporación por el que hay que pagar 1.164 euros*.
Mercedes ha querido primar la comodidad del pasaje dentro de las limitaciones de espacio mencionadas. Pero el ocupé se muestra ágil y divertido de conducir. Ha ganado en deportividad respecto a su antecesor el CLK. La suspensión es más dura, la dirección más precisa -aunque sin llegar a los niveles de BMW- y el cambio 7G-TRONIC ha mantenido su exquisita suavidad pero aumentado su velocidad de reacción, con lo que se muestra menos aburrido que en otros modelos de la marca.
Amortiguación variable
Una de las principales razones del buen comportamiento de este coupé en carretera y ciudad es el nuevo tren de rodaje Agility Control. Consiste en un sistema de amortiguación variable que se adaptan a la situación del vehículo y la calzada. Durante una conducción normal con impulsos reducidos en los amortiguadores, disminuyen automáticamente las fuerzas de amortiguación; en cambio, si es necesario en curvas tomadas de forma dinámica o en maniobras bruscas de cambio de carril, se activa la fuerza máxima de amortiguación. De ese modo, el tren de rodaje trata de satisfacer las exigencias de confort de rodadura y agilidad sin detrimento de la seguridad.
El vehículo de la prueba contaba además con tren de rodaje deportivo (305 euros). Esta opción aporta una dirección paramétrica deportiva, muelles más rígidos, amortiguadores de reglaje más duro y barras de torsión más anchas. Al tomar curvas con rapidez o en maniobras rápidas de cambio de carril, el reglaje deportivo del tren de rodaje se distingue por un menor balanceo de la carrocería. Sin duda, una opción que merece la pena.
El propulsor diesel tope de gama no decepcionará en ningún momento al conductor, todo lo contrario. El V6 del E 350 CDI BlueEFFICIENCY es uno de los motores diesel más modernos existentes en el mercado. Se caracteriza por una entrega lineal de la potencia desde bajas revoluciones, mucha fuerza y una gran elasticidad. Es un motor muy redondo. Tiene una impresionante cifra de par de 540 Nm disponible entre las 1.600 y las 2.400 rpm.
Buenas cifras de consumo
Con este motor, el Coupé acelera en 6,7 segundos de 0 a 100 km/h y alcanza una velocidad máxima autolimitada de 250 km/h. El consumo es bastante bueno, Mercedes habla de 6,8 litros de gasoil cada 100 kilómetros, aunque en la prueba se registró una cifra algo superior a los 7 litros.
Uno de los puntos fuertes de este deportivo no se aprecia a simple vista: la seguridad. Los sistemas de asistencia a la conducción que ayudan a evitar accidentes por alcance en la Clase S están ahora también a disposición en la Clase E Coupé: son capaces de frenar automáticamente el coche si existe peligro de choque inminente y el conductor no reacciona a las señales de advertencia. A ello hay que añadir siete airbags de serie, pretensores de cinturón y limitadores de la fuerza de tensado en todas las plazas y reposacabezas activos para el conductor y el acompañante.
Mercedes-Benz pide 56.175,00 por el E Coupé 350 CDI BlueEFFICIENCY. Un precio que puede verse incrementado casi hasta el "infinito" con una lista de opciones que parece no acabar nunca. El modelo de la prueba tenía un precio final de 76.532 euros e incluía opciones como el paquete bi-xenon (1.574 euros), techo corredizo panorámico (1.552 euros), Comand APS (2.883 euros)...
*Los precios de las opciones se ofrecen sin IVA