"Love is in the car": las mejores escenas románticas del cine a bordo de un coche

Qué bonito San Valentín. Cuántas historias de amor han tenido su punto de partido... a bordo de un coche, en los asientos de delante o en la fila de atrás. Y el cine, como siempre, ha sabido retratar a la perfección esa mezcla de pasión y gasolina (o diésel).

"Desayuno con diamantes" (1961)

Una de las escenas de amor más recordadas de la historia del cine es la que protagonizan George Peppard (sí, el de "El equipo A", cuando todavía aspiraba a ser actor) con la sin par Audrey Hepburn... y un gato llamado "Gato". Es el final de la película, y Paul (Peppard) intenta convencer a Holly (Hepburn) de que no huya de él, del amor y del compromiso. Y al final, el que (casi) lo paga es el pobre Gato, que (casi) termina abandonado en las mojadas calles de Nueva York. El taxi en cuestión es un Plymouth Saboy del 57.

"Dos en la carretera" (1967)

La reciente muerte de Albert Finney nos ha hecho recordar a muchos una de sus mejores películas, "Dos en la carretera", dirigida por Stanley Donen ("Cantando bajo la lluvia") y con, de nuevo, la maravillosa Audrey Hepburn. Film experimental en su época, narra 12 años en el matrimonio de Mark (Finney) y Joanna (Hepburn) a través de diferentes viajes por la Normandía francesa. Una "road movie" total, entre todos los muchos coches que aparecen destaca un mítico MG TD de 1950.

"Grease" (1978)

Icono del cine romántico y musical de los últimos 40 años, reemitida casi a diario en todas las televisiones, "Grease" lo tiene todo en cuanto a coches se refiere: un tuneo en toda regla, una carrera en los sucios canales de Los Ángeles y... una escena romántica, por supuesto. Y además en un autocine, todo muy yanqui. Aunque la "emoción" de Danny (John Travolta) tras pedir compromiso a Sandy (Olivia Newton-John), termina por arruinar la escena. Todo ello, a bordo de un Dodge Wayfarer Roadster del 49.

"Pretty woman" (1990)

Otra película que podemos ver casi a diario en la televisión, en "Pretty Woman" hay dos escenas de amor con coche, no una. La principal tiene como protagonista a un impresionante Lotus Esprit SE Type 85, en el que Edward (Richard Gere) termina contratando, sin querer, los servicios de una prostituta, Vivian (Julia Roberts). Y como el Lotus es manual, y los americanos son unos completos inútiles en coches que no son automáticos, al final es Vivian quien le conduce hasta el hotel. Al final de la película, el caballero Edward "rescata" a la princesa Vivian a bordo de una espectacular limusina Cadillac Fleetwood Brougham del 84.

"Thelma & Louise" (1991)

Sí, estamos en San Valentín, en la festividad del amor. Pero es que el amor no tiene por qué ser exclusivamente entre dos "seres humanos". Se puede amar también, con pasión, por ejemplo a la libertad, y de ello trata la última escena de otra de las grandes películas de final del siglo XX. Otra impresionante "road-movie" en la que dos mujeres (Susan Sarandon y Geena Davis) huyen por el desierto a lomos del Ford Thunderbird del 66, de un espectacular verde esmeralda, propiedad de Louise (Sarandon). Ese acelerón a su destino final con el Gran Cañón como escenario es ya historia del Séptimo Arte.

"Crash" (1996)

En la "Crash" dirigida por David Cronenberg –hubo otra "Crash" en 2004, con Matt Dillon– sí hay coches, sí hay parejas, pero amor, amor... Porque la película trata sobre un grupo de personas que padecen sinforofilia, una patología que provoca excitación sexual con los accidentes de tráfico. "Crash" fue muy polémica en su día, pues retrataba con toda crudeza la fina línea que puede llegar a separar el dolor del placer sexual. Varias son las escenas que te abren los ojos como platos, protagonizadas por Holly Hunter, Elias Koteas, Rosanna Arquette, James Spader y Deborah Kara Unger –estos dos últimos cerrando la película con otra "tierna" escena– tras estrellar un Mazda MX-5 Miata.

"Titanic" (1997)

El mayor barco de su época, con capacidad para 3.500 personas entre pasaje y tripulación, 269 metros de eslora, 53 de puntal (altura), 860 camarotes... y Jack (Leonardi DiCaprio) y Rose (Kate Winslet) eligen el asiento trasero de un coche para su primer "encuentro íntimo". Eso sí, no eran unas plazas traseras cualesquiera, pues el vehículo era un Renault AX Limousine 35 CV de 1912, un auténtico "Premium" de la época, con un lujoso interior en piel, latón y caoba. Un nido de amor en toda regla.

"Love actually" (2003)

Aunque no tiene lugar en San Valentín, sino en Navidad, "Love Actually" es sin duda la película romántica más icónica de los últimos 20 años. Varias son las historias de amor que se entremezclan, pero en cuestión de coches nos quedamos con la que protagonizan Jamie (Colin Firth) y su asistenta portuguesa Aurelia (Lúcia Moniz). Cuando Jamie lleva a Aurelia al aeropuerto en su Saab 900, en la que se supone será la última vez que se vean, queda claro que la historia... no ha terminado.

"Rush" (2013)

Mira que se nos antojaba difícil que un "biopic" de la rivalidad entre Niki Lauda y James Hunt nos resultara creíble. Pero "Rush", dirigida por Ron Howard, nos sorprendió, nos cautivó y nos encantó. Y como el amor no está reñido con el asfalto de altas prestaciones, una de las mejores escenas sin duda es cuando Lauda (Daniel Brühl) conoce a la que será su mujer, Marlene (Alexandra Maria Lara), y la impresiona de la mejor forma que sabe, haciendo "volar" un Lancia 2000 Berlina de 1971 por carreteras secundarias italianas.

"La La Land" (2016)

Y para terminar, uno de los últimos grandes éxitos de los últimos años, ambientado además en una de las ciudades con el tráfico más infernal de todo el mundo: Los Ángeles. El inicio de "La La Land" es un impresionante número musical en el que los protagonistas son los pacientes usuarios de las autopistas que rodean L.A., que a pesar de estar parados, deciden cantar y bailar "Another day of life". Al terminar el baile, asistimos, aún en pleno atasco, al momento en que se conoce la pareja protagonista: Mia (Emma Stone), a bordo de un Toyota Prius; y Seb (Ryan Gosling), al volante de un glamuroso cabrio Buick Riviera de 1982.