Motor
Iveco LMV 'Lince': el vehículo que salva la vida a los soldados españoles
Juan Luis Soto
La pasada semana, unos soldados españoles de la base Miguel de Cervantes en el sur de El Líbano acabaron con un violento sobresalto su patrulla rutinaria. La dotación del Lince progresaba por los alrededores de la localidad de Marjayun cuando una de sus ruedas pisó una mina mientras abandonaban un puesto elevado de observación.
La dotación del blindado español, compuesta por cinco militares, fue sacudida por la estruendosa explosión del artefacto. La conmoción en el interior de un blindado en esas circunstancias es difícil de explicar si no se ha vivido una situación semejante. Y suele ser mortalmente grave si ocurre en un transporte sin blindaje específico para este tipo de misiones.
Un segundo vehículo se apresuró a proteger a sus compañeros y asegurar la evacuación hasta la base Miguel de Cervantes, puesto que el Lince quedó seriamente dañado, con una de sus ruedas arrancada del eje debido a la explosión. Afortunadamente, todos los miembros de la patrulla salieron indemnes del grave percance bélico según la información facilitada por el Ministerio de Defensa.
El vehículo Lince fue adoptado por el ejército español siguiendo el mismo criterio que las fuerzas armadas de otros países europeos, como Italia, Gran Bretaña, Bélgica, Noruega o Croacia. Se trata de un Iveco LMV, siglas de Light Multipurpose Vehicle, diseñado como transporte ligero de tropas en zonas de conflicto. También puede servir a otros cometidos, como ambulancia o unidad de transmisiones.
Tres toneladas de blindaje
Se fabrica en la planta italiana de Bolzano en dos versiones, corta o larga, y equipa un motor turbodiésel 3.0 de cuatro cilindros, con 190 CV de potencia y 46 mkg de par máximo. Su caja de cambio es automática de seis velocidades y reductora conectada a una tracción es integral a las cuatro ruedas, con diferenciales bloqueables en ambos ejes. El LMV necesita una mecánica potente puesto que su peso rebasa los 7.000 kg en orden de combate.
De ellos, 3.000 pertenecen a su blindaje, de tipo modular, que corresponde a la clasificación de Nivel 4 en este tipo de protecciones. Eso quiere decir que la chapa de su carrocería, de un centímetro de espesor, es capaz de detener munición de fusil de asalto o ametralladora y la metralla de granadas de mano. El diseño de sus bajos es especial, para desviar la onda expansiva de minas terrestres y también recibe un blindaje específico para ellas, capaz de aguantar el efecto destructor de hasta seis kilos de explosivo.
En el Iveco LMV o Lince como se le conoce en nuestro ejército, los ocupantes viajan rodeados de una protección que les refugia en gran parte de las situaciones peligrosas que se dan durante las patrullas de reconocimiento y vigilancia. Incluso no tienen que salir del vehículo para repeler una posible agresión ya que su ametralladora puede ser accionada desde el interior por control remoto. El Lince puede completar recorridos de hasta 500 km gracias a su gran autonomía, a una velocidad máxima de 130 km/h.