Economía/Motor.- El 58% de los conductores cree que subir las multas por beber y conducir es una medida recaudatoria
MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
Esta reforma de la Ley de Circulación contempla que las multas por conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas pasarán de 500 a 1.000 euros, lo que, en opinión de casi seis de cada diez conductores, no tiene un fin de mejora de la seguridad vial, sino recaudatorio.
No obstante, casi cuatro de cada diez usuarios considera apropiado este incremento sancionador siempre que sirva para disuadir a las personas que conduzcan con una tasa de alcohol superior a la permitida, mientras que el 50% considera que duplicar la multa ayudará a que muchas personas se lo piensen "dos veces" antes de ponerse al volante después de haber consumido bebidas alcohólicas.
Además, el 57% de los conductores mostró su respaldo a la subida del límite de velocidad hasta 130 kilómetros por hora en algunos tramos de autovías y autopistas, siempre que las carreteras estén en buenas condiciones, "ya que en los últimos años se ha reducido de forma notable la inversión en conservación de las vías".
Según AutoScout24, el proyecto de ley también contempla la reducción de los límites máximos de velocidad en carreteras secundarias, una medida que es rechazada por el 80% de los usuarios, en favor de la mejora de la calidad de las infraestructuras viarias.