Los coches que mejor (y peor) visibilidad ofrecen del mercado
La visibilidad es uno de los factores que más condicionan la seguridad a bordo de un coche, pero se trata de uno de los rasgos más descuidados por los fabricantes de coches. Así se desprende del estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) de 1.200 vehículos desde que iniciara en 2006 un nuevo método de análisis.
¿En qué consiste el proceso de medición de la visibilidad de los automóviles? La OCU recurre a un laboratorio que utiliza una cámara situada exactamente al nivel de los ojos de un conductor de 1,74 metros de altura, a partir de la cual se obtiene una imagen panorámica de 360º. A continuación, un ordenador determina la franja equivalente al campo de visión para una visibilidad óptima y localiza las superficies ocultas.
Según esta organización, que vela por los intereses de los consumidores en España, hasta ahora ningún coche ha obtenido la máxima nota posible, mientras que más de la mitad apenas llegan a la calificación de "aceptable". Por ello, ha querido elaborar un ránking con los modelos que se comercializan en el mercado español que mejor, y peor, visibilidad ofrecen, para que los usuarios puedan elegir de acuerdo a unos criterios de mayor seguridad.
Los diez coches que mejor visibilidad ofrecen son:
- Renault Clio II (modelo vendido hasta final de 2012)
- Citroën DS3
- Volkswagen Up
- Smart Fortwo Coupé
- Lada Niva
- Citroën C2
- Citroën C4 Grand Picasso
- Peugeot 206 +
- Audi A1
- Renault Twingo
Mientras, los diez coches que peor visibilidad ofrecen son:
- Volkswagen CC
- Kia Optima
- Mercedes Clase A
- Honda Civic
- Nissan Cube
- Crevrolet Cruze
- Opel Ampera
- Volkswagen Caddy
- Dacia Logan Break
- BMW X5
Además, desde la OCU han querido llamar a los fabricantes de coches a "tomarse en serio el problema" y a hacer un ejercicio de innovación para solucionar los defectos en el diseño del vehículo que suelen penalizar la visibilidad. Por ejemplo, la organización propone idear un sistema que abata de forma automática los reposacabezas traseros, que tanta visión restan al mirar por el espejo retrovisor interior, siempre que éstos no estén siendo utilizados.