¿En qué detalles hay que fijarse antes de comprar un coche de segunda mano?

¿Va a comprar un vehículo de ocasión? Pues tenga mucho cuidado con lo que venden, los defectos pueden salir muy caros. Por ejemplo, sustituir la caja de cambios le puede costar 2.000 euros. ¿Tiene miedo de no saber si un coche usado está bien conservado o no? Preste atención a los diez puntos en que le aconsejamos centrarse y deje de preocuparse. Información facilitada por Autofácil.es.

1.- Si existen roturas, descártelo.

Compruebe si tiene bien la suspensión: con el vehículo parado, apóyese en cada una de sus esquinas y empuje hacia abajo. Si está bien, volverá a su posición inicial y no oscilará más; si no, le tocará cambiar los amortiguadores -desde 240 euros-. También puede circular por una carretera bacheada y si nota que las ruedas 'rebotan' demasiado, será señal de que habrá que sustituir los amortiguadores. Igualmente, inspeccione visualmente los anclajes de la suspensión. Si ve roturas, descarte la compra.

2.- Cuidado si echa mucho humo.

Con el vehículo a 50 km/h en segunda marcha, mantenga esa velocidad unos segundos y luego acelere a fondo. Si sale humo azulado -indica consumo de aceite-, el motor está desgastado -repararlo le costará desde 600 euros-; si es blanco, falta carburante en la combustión; si es negro -en los diésel es normal que sea de este color-, el sistema de alimentación no está en buen estado, pues consume demasiado combustible -desde 100 euros-.

Además, cuando suelte el acelerador 'de golpe' para que el motor retenga, observe si sale humo azulado: eso indica un problema de desgaste de culata -desde 500 euros-. Por otro lado, cuando el motor alcance su temperatura normal, deténgase y déjelo a ralentí. La temperatura no debe subir. De lo contrario, existe un problema de refrigeración. Repararlo no es caro -desde 30 euros- y puede evitar una avería grave.

3.- Observe los faros.

Además de iluminarse cuando los accione -de no hacerlo, indica un fallo en la centralita de luces-, deben tener la intensidad suficiente y no mostrar ninguna oscilación. De lo contrario, existe un problema que puede afectar al alternador -desde 120 euros-, a la centralita de luces -desde 150 euros- o al cableado - desde 20 euros-. Compruebe también que el aire acondicionado expulse aire frío en menos de un minuto -solucionarlo puede costar desde 50 euros- y que la calefacción funcione correctamente.

4.- Fíjese en la tapicería.

Ésta delata si tiene muchos kilómetros. Fíjese en el estado y mullido de los asientos, en el desgate de los pedales, del pomo del cambio, del volante... Si están muy deteriorados, es síntoma de que el coche tiene un número de kilómetros elevado -más de 100.000 km- o de que ha sufrido un 'trato' poco cuidadoso. Desconfíe mucho más si el cuentakilómetros marca una cifra baja.

5.- Revise los niveles de los líquidos.

Compruebe los niveles de aceite, del líquido refrigerante y del de frenos. Si alguno está bajo o si tiene un aspecto degradado, desconfíe del vehículo. El aceite no debe estar muy negro ni muy viscoso, mientras que un líquido de frenos en mal estado se ennegrece -sustitúyalo cada dos años- y puede oxidar las partes internas del sistema de frenos -desde 90 euros-. Tenga en cuenta que estos fluidos son vitales para el buen funcionamiento de un sistema y, sobre todo, para su longevidad. Cambiarlos cuesta desde 100 euros, pero las averías pueden superar los 600 euros.

6.- Rechácelo si aprecia anomalías en el cambio o el embrague.

Pongs el freno de mano, inserte la segunda marcha e intente circular: el motor debe calarse; si no, el embrague está desgastado y 'patina' -cuesta unos 350 euros-. Observe si el pedal vibra mucho o si sube en exceso hasta que comienza a circular. Por otro lado, al cambiar de velocidad no deben existir holguras entre las marchas y deben entrar con suavidad. En punto muerto, pise el embrague y suéltelo. Si 'ronronea', el líquido de la caja de cambios está mal estado: sustituirlo cuesta unos 50 euros, pero cambiar la caja entera, unos 2.000 euros.

7.- Mucha atención a los frenos.

A baja velocidad -unos 60 km/h- y en una carretera recta y sin tráfico, frene con contundencia pero sin bloquear las ruedas. Debe notar que el coche no se va hacia ningún lado; si no, existe un problema en los discos, pastillas, bomba... y habrá que revisar el sistema. Arreglarlo cuesta desde 50 hasta 300 euros. Si el vehículo lleva ABS, circule por un camino de tierra recto y sin baches y, a 20 km/h, frene a fondo con el embrague pisado. Si el pedal de freno no vibra, el ABS no funciona -repararlo, unos 600 euros-.

8.- Sistema de arranque.

Una avería en este sistema puede salir muy cara. El arranque de un motor con inyección electrónica -ya sea diésel o gasolina- debe ser inmediato -en los diésel, espere a que se apague la luz de los calentadores-. Si no es así, o una vez en marcha el ralentí se muestra inestable, es un indicio claro de que existe un problema en el sistema de alimentación -puede costar hasta 2.500 euros-; en el de precalentamiento -en el caso de los diésel, reparable por unos 100 euros de media-: en algún sensor de temperatura -desde 60 euros-; o en la falta de compresión en uno o varios cilindros -indica un mal trato o un elevado número de kilómetros y puede ser necesaria una rectificación del motor, avería que supera los 600 euros-.

9.- Sistema de dirección.

Compruebe que, después de girar, la dirección tiende a ponerse recta. Si no, puede haber algún fallo en la junta cardánica -unos 70 euros- o en la cremallera -desde 200 euros-. Cuando circule en línea recta y a unos 80 km/h, verifique que el coche no tiende a irse hacia ningún lado; de lo contrario, puede haber algún defecto de alineación -se soluciona con un paralelo, por unos 50 euros- que puede haber desgastado los neumáticos de forma irregular -le obligará a sustituirlos-.

Si, además, escucha algún tipo de chasquido al girar, puede existir un problema grave -sobre todo porque puede romperse y provocar un accidente- en el sistema de dirección que puede afectar a una rótula, a la cremallera... Subsanarlole costará desde 150 euros. Compruebe también que, si está asistida, no cuesta girar más hacia un lado que hacia otro. Reparar una dirección cuesta desde 60 hasta 600 euros de media.

10.- Afine el oído con la transmisión.

Si el coche es de tracción delantera, circule por una glorieta y si al girar y al acelerar escucha un chasquido intermitente, tendrá que cambiarlas -90 euros-. En los de propulsión trasera o total, observe que no vibran. En ambos casos, compruebe las juntas de goma que hay antes de su unión con la rueda -si están en mal estado, la transmisión puede estar defectuosa-, y también si se producen pérdidas de aceite en el otro extremo -donde se une con el diferencial o la caja de cambios-.