Motor
Mercedes-Benz SL 65 AMG: un roadster de 630 CV para volar a cielo abierto
Hace unos días, en el Salón de Ginebra, Mercedes-Benz mostró su nuevo SL 63 AMG, que imprimía un espíritu mucho más deportivo a su ya de por sí dinámico roadster. Pero aún así, supo a poco a muchos fans de la marca de la estrella. En previsión de ese inconformismo, la firma presenta ahora su nuevo SL 65 AMG, cuyo motor de doce cilindros aspira a satisfacer la demanda de los clientes más ambiciosos en prestaciones sobre el asfalto.
Los 630 CV del motor V12 biturbo que equipa dejan muy atrás los 537 CV del V8 del SL 63 AMG y, pese a contar con 100 kg más de peso, el SL 65 AMG rebaja en tres décimas la aceleración de 0 a 100 km/h de su hermano menor: los hace en apenas 4 segundos y alcanza una velocidad máxima, que ha sido limitada electrónicamente, de 250 km/h.
Una caja de cambios de doble embrague y siete marchas es la encargada de transmitir toda la fuerza del propulsor con el mayor grado de dinamismo y efectividad posible, con posibilidad de elegir, con sólo pulsar un botón, entre cuatro modos de conducción: Efficiency, Sport, Sport Plus y Manual.
Pero, por supuesto, ese aumento en las prestaciones de la mecánica se notan -y de qué manera- en el consumo del SL 65 AMG, que sube casi dos litros por cada 100 km recorridos con respecto a los 9.9 l de la versión más discreta, aunque ahorra un 17% de combustible frente a su predecesor: 11.6 del actual, por 14 l/100km recorridos.
La misma apariencia... Un precio superior
En cuanto a su estética, desde fuera sería prácticamente imposible de distinguir de no ser por el logo 'V12 Biturbo' impreso en la zona lateral, justo antes de llegar a las ruedas delanteras. Y en lo que respecta a su capota, ésta sigue siendo idéntica -se despliega en menos de 20 segundos- y también incluye la opción de Magic Sky Control, que permite regular la transparencia del techo panorámica con tan sólo accionar un botón.
El SL 65 AMG estará disponible en los concesionarios europeos a partir del próximo mes de septiembre y su precio de lanzamiento será, para el mercado alemán, de 236.334 euros (impuestos indirectos incluidos); un precio que representa casi 80.000 euros más que los de su flamante hermano menor.