La FIA impide que Lotus sea el nuevo Red Bull al prohibir su revolucionario sistema

La prohibición del uso del sistema de altura variable por parte de la FIA puede tener más efectos de los esperados a priori. La escudería Lotus había sido pionera en el desarrollo de esta tecnología que prometía ser la revelación durante el Mundial de 2012, por lo que su restricción evita que el equipo dirigido por Eric Boullier se erija como la revelación del año en la F1.

El ya ilegal sistema fue probado por Lotus Renault en el test de jóvenes pilotos celebrado al final de la pasada temporada en Abu Dabi con un resultado que despertó el optimismo de sus responsables. Durante todo el invienro, gran parte de sus esfuerzos se han centrado en el perfeccionamiento de esta tecnología de control de altura, con la esperanza de que, con el inicio de la temporada, experimentaran un salto de calidad para volver a estar, como en la etapa de Fernando Alonso, luchando con los equipos de arriba.

Tal era la confianza en el nuevo sistema que, incluso, muchos equipos habían empezado ya a desarrollar dispositivos similares: Williams o, incluso, Ferrari trabajaban ya en este sentido cuando se filtró la prohibición por parte de la FIA.

La FIA le corta las alas a Lotus

Con su decisión, el máximo organismo regulador de la F1 corta las alas a las aspiraciones de Lotus e impide que pueda darse un caso similar al que protagonizó Red Bull hace dos años con el desarrollo de su revolucionario difusor soplado, cuya ventaja aerodinámica ha sido decisiva en la consecución de los dos últimos títulos mundiales del alemán Sebastian Vettel.

La pregunta surge de forma inmediata. ¿Ha sido premeditada la decisión de la FIA? Puesto que aún no hay argumentación oficial, habrá que esperar para conocer los motivos, sinceros o no, de la polémica decisión.