Ferrari respalda a Alonso y admite que el F150º debe mejorar en clasificación

Stefano Domenicali, director de equipo de Ferrari, ha respaldado la exigencia de Fernando Alonso de que su monoplaza pueda ser más competitivo durante la ronda de clasificación de los Grandes Premios, que hasta ahora ha sido su talón de Aquiles.

Alonso ha sido el piloto que más puntos ha sumado en las cuatro últimas carreras del Mundial, lo que le ha permitido acercarse, aunque en una distancia mínima, al líder Sebastian Vettel (Red Bull) y engancharse así a la lucha por el título.

Sin embargo, los podios del asturiano habrían tenido más oportunidades de convertirse en victoria si su F150º hubiera sido más competitivo en las tandas de clasificación de dichos Grandes Premios; sobre todo, en la Q3, donde Red Bull y McLaren han demostrado configurar mejor los mapas de motor para alzarse con las primeras posiciones en la parrilla de salida por delante de Ferrari.

Por ello, Alonso se mostraba tajante el pasado domingo, al término de la carrera disputada en Hungaroring. "Es aquí donde perdemos muchas de las posibilidades que luego podemos tener en carrera. En carrera, el ritmo es bueno, pero en la crono siempre salimos demasiado atrás. Ellos tienen algún mapa de motor, algo que utilizan sólo en la Q3 y nos sacan siempre demasiada ventaja. A ver si podemos trabajar en ello", se quejó el corredor español.

Tras estas declaraciones, Ferrari ha salido inmediatamente a respaldar a su primer piloto. Domenicali reconoce que en rendimiento en carrera están a un nivel igualado con las escuderías de arriba, "pero si hablamos de rendimiento, en la calificación necesitamos mejorar en la Q3 porque en este aspecto todavía no estamos a la altura", ha asegurado en declaraciones recogidas por EFE.

No podrán trabajar hasta dentro de tres semanas

Por tanto, en la escudería 'roja' tendrán que empezar a trabajar en poner a punto a sus monoplazas pensando en la Q3 clasificatoria para aumentar las posibilidades de que Fernano continúe con opciones al título. 

Pero tendrán que esperar a que finalice el parón por las vacaciones de verano, ya que durante tres semanas las fábricas permanecerán cerradas bajo supervisión de la FIA y los equipos no podrán trabajar en mejoras ni hacer pruebas con sus coches. El problema es que, quizás, cuando puedan empezar a mejorar en aquel aspecto puede ser ya demasiado tarde para cambiar el devenir del Mundial.