La debacle de Ferrari precipita las dudas: ¿seguir compitiendo o pensar en 2012?
- La distancia entre Alonso y Vettel es ahora de 92 puntos
- Briatore podría trabajar en el coche de 2012 desde este verano
Corren vientos de cambio en Ferrari. Tras la decepcionante temporada del equipo de Fernando Alonso y, en especial, tras el enorme fiasco del Gran Premio de Canadá, en Maranello están obligados a tomar importantes decisiones sobre su futuro: seguir compitiendo o centrarse desde ya en el desarrollo del coche de 2012; ésa es la cuestión.
A nadie en el mundo de la Fórmula 1 se le escapa que en Ferrari reina la frustración por los discretos resultados obtenidos hasta la fecha en el vigente Mundial. Atrás quedaron los tiempos en los que la superioridad roja se dejaba notar en cada Gran Premio, con independencia de cuál fuera el desenlace. En 2011, la escudería italiana es sólo una más de las que luchan contra el monopolio que Red Bull está imponiendo esta temporada.
En Ferrari, como no podía ser de otro modo, no se resignan y han centrado todo sus esfuerzos en mejorar el F150º para llevar a cada carrera un monoplaza más competitivo. Todo apuntaba a que estaban consiguiendo reducir la distancia con la escudería del "toro rojo", pero cuando parecía que por fin había llegado el momento de dar un golpe en la mesa y adelantar por la derecha a Red Bull, todo volvió a desmoronarse en Canadá.
A pesar de que el piloto alemán Sebastian Vettel, con una conducción casi perfecta, demostró estar todavía un escalón por encima en la tanda de clasificación logrando la pole, en Ferrari eran optimistas con respecto al desarrollo de la carrera y se mostraban confiados de las posibilidades de Alonso, que partía segundo, para ganar al piloto de Red Bull.
Sin embargo, la carrera del domingo puso de manifiesto que el pobre rendimiento de Ferrari no es causa exclusiva de un ramplón monoplaza, sino que la desconfianza y la improvisación que reinan en la escudería roja también tienen mucho que ver en esa depresión deportiva por la que pasan en Maranello. A la lluvia de Montreal, se sumó la falta de previsión de Ferrari, su mala estrategia y la descoordinación que provocó que Alonso y Massa pararan en la misma vuelta.
Lo que había sido la gran esperanza de Ferrari para empezar a remontar en la clasificación general se tornaba en Canadá en el desaprovechamiento de la mayor oportunidad para el piloto asturiano de volver a meterse en la lucha por el Mundial. Tras Montreal, Vettel ha dejado la distancia entre ambos a la contundente diferencia de 92 puntos.
La incertidumbre se apodera de Ferrari
Surge, a partir de ahora, la cuestión de qué hacer en el seno de Ferrari. ¿Siguen compitiendo? ¿Se centran en el monoplaza de 2012? ¿Desmantelan todo el equipo en busca de un cambio radical que vuelva a auparles en lo más alto de la Fórmula 1? ¿O intentan materializar el cambio desde dentro? Son preguntas que se hacen cada día en Maranello y cuya respuesta definitiva parece que saldrá de los resultados obtenidos en los dos próximos Grandes Premios. "Después de dos carreras veremos cómo será realmente la segunda parte de la temporada en términos de rendimiento", ha asegurado Stefano Domenicalli en declaraciones recogidas por Europa Press.
El propio Alonso aseguró hace unas semanas que el GP de Gran Bretaña, que se disputará en el circuito de Silverstone el próximo 10 de julio, será clave para Ferrari. Según el piloto asturiano, será entonces, dependiendo de las sensaciones, de los resultados alcanzados y del estado de la clasificación general, cuando decidirán si siguen compitiendo o si, por el contrario, se centran en el desarrollo del monoplaza para 2012.
Briatore podría ser el 'salvador' de Ferrari
Paralelamente a esta travesía a la deriva, los cambios se van sucediendo en el staff de Ferrari a medida que avanza la temporada y, con ella, los malos resultados. Tras la destitución de Chris Dyer como ingeniero jefe a finales de 2010 y la reciente salida de Aldo Costa, se ha especulado con que el ex jefe de Renault, Flavio Briatore, podría hacerse cargo de Ferrari y empezar a trabajar desde este verano en el coche de 2012.
Unos rumores que se han amplificado con la debacle de la escudería roja en Canadá, por lo que otra mala carrera en el próximo GP de Europa, que se disputará el 26 de julio en Valencia, podría ser el detonante que precipite la llegada de Briatore a Ferrari en un corto plazo.
Así las cosas, sólo cabe esperar a comprobar cómo se desarrollan los acontecimientos en las dos siguientes carreras en las que, por otro lado, Ferrari pondrá toda la carne en el asador para no volver a quedar en evidencia y aferrarse a la penúltima oportunidad de mantener sus aspiraciones al título.