Fórmula 1
Fernando Alonso debuta de rojo con los deberes sobre su nuevo Ferrari en la mesa
El sueño del motor español cumple hoy su primer paso. Fernando Alonso 'debutará' con Ferrari a casi 1.500 metros de altura, en la localidad de Madonna de Campligio, donde comienza la temporada con su nuevo equipo. Perfilar los detalles técnicos de la nueva máquina roja será su objetivo durante estos primeros días.
En esta mítica montaña del alto standing italiano se producirá la tan deseada foto para todo el mundo de la Fórmula 1: Alonso por fin se vestirá de rojo.
Acompañado de su compañero de filas, Felipe Massa, el asturiano posará para los medios con sus nuevos colores y patrocinadores (entre ellos el banco Santander que ha pagado 40 millones de euros por temporada por vincular su marca con la marca italiana y el bicampeón español).
La ansiada instantánea será el pistoletazo de salida para una semana repleta de compromisos publicitarios y de esponsorización. Apenas seis días de intensa confraternización entre todos los miembros de la escudería.
Pilotos, mecánicos y demás trabajadores se conocerán mejor y comenzarán a descifrar los primeros detalles del coche con el que el corredor español espera volver a lo más alto del podio.
Las dudas del nuevo Ferrari
El diseño del nuevo Ferrari es, todavía, una incógnita, si bien la nueva normativa de la FIA para esta temporada obligará a ciertas modificaciones comunes para toda la parrilla de salida.
La más destacada con respecto a temporadas anteriores será el tanque de combustible. De los 90-100 kilos que pesaba en la temporada anterior pasará a casi 230 en función del modelo. El nuevo reglamento prohibe repostar y por lo tanto, será necesario más espacio para más gasolina.
Una sustancial variación que obliga a aumentar el peso del monoplaza (de 605 a 620 kilos) y, por lo tanto, también la distrubución de cargas. Ésta será una de las principales tareas de Fernando Alonso, genio en el manejo de tan delicada decisión.
A ello habrá que unir modificaciones como el tamaño de las gomas (cada rueda pasará de 270 m.m. a 245), un chasis entre 10 y 15 centímetros más largo o la supresión de los tapacubos refrigeradores que tantos problemas dio a Ferrari en los repostajes de la pasada campaña.
Cambios más o menos confirmados sotto voce a los que habrá que unir las dudas sobre la forma de los alerones, la ubicación de los radiadores o cóm será la nueva caja de cambios.
El Cavalino Rampante más español ya está en marcha. Pistoletazo de salida para el sueño de Fernando Alonso y miles de aficionados. Paraíso que sólo será completo si el asturiano vuelve a lo más alto del cajón.