Volvo aumenta el desarrollo de sus vehículos eléctricos con un nuevo C30
Después de un primer prototipo de coche eléctrico, Volvo presenta otro segundo vehículo totalmente eléctrico en el Salón del Automóvil de Detroit. El C30 se convierte así en un paso más en el proceso de desarrollo de este tipo de tecnología por parte de la marca sueca que pretende crear una flota eléctrica para pruebas.
"El C30 eléctrico de Detroit es un producto mucho más completo", afirma afirma Lennart Stegland, director de la división Special Vehicles de Volvo Cars. Esto se ha conseguido después de haber identificado los principales problemas tecnológicos y conseguir resolverlos.
El siguiente paso será fabricar una serie de vehículos de prueba que, tras seleccionar a una serie de usuarios, podrán disfrutar de ellos durante un periodo de dos años con el fin de adquirir una experiencia para Volvo Cars tanto técnica como de comportamiento.
Su aspecto es parecido al C30 convencional y ofrece los mismos niveles de seguridad, confort y espacio. Su diferencia más obvia se encuentra en el interior, con la incorporación de nuevos instrumentos como un indicador del estado de carga de la batería.
El nuevo C30 eléctrico viene alimentado por baterías de iones de litio que pueden recargarse en una toma eléctrica normal o en estaciones de servicio especiales en carretera. La carga de la batería completa tarda ocho horas.
No tiene marchas y la potencia del motor se desarrolla gradualmente, alcanzando la plena potencia de forma inmediata. Puede llegar a alcanzar una velocidad máxima de hasta 130 km/h y consigue pasar de 0 a 100 en 11 segundos. Tiene una autonomía propia de hasta 150 km, que cubre perfectametne las necesidades de transporte diario del 90% de los europeos.