Los inversores no respondieron de forma positiva a la presentación de los nuevos productos de Apple. Si bien es cierto que, muchas de las características de las nuevas versiones del iPhone, el del décimo aniversario, ya se conocían y habían llevado ya a sus títulos a alcanzar máximos históricos.
Así, tras el esperado evento, las acciones de la compañía, que en el transcurso de la jornada llegaron a repuntar más de un punto porcentual, se dejaron un 0,4%.