Días antes de que la entidad gala publique sus resultados semestrales, dos firmas de inversión han rebajado su estimación de BPA para el ejercicio, lo que se une a los recortes que ya ha sufrido en los últimos meses.
Ha sido un verano nada tranquilo para el mundo financiero. Y es que, el recrudecimiento de la crisis de la deuda soberana, unido a una posible recesión en EEUU, ha llevado a poner en entredicho de nuevo la solvencia de la banca. Pero no sólo la de los países periféricos ya que, en las últimas semanas, también el sector financiero galo tuvo que purgar las dudas del mercado.