Buscar

¿Hay una burbuja en las materias primas o su subida es un síntoma real de mejora económica?

Agustina Barbaresi
22:00 - 22/12/2010

A corto plazo las subidas se sustentan en la expectativa de un mayor crecimiento económico. Pero con este estirón ya se han comido todo el recorrido a largo plazo que le daba la media de bancos de inversión.

Casi siempre que un activo sufre una fuerte apreciación, aparecen voces que defienden la posible creación de una burbuja. Esta vez le ha tocado a las materias primas, sobre todo a la energía y los metales industriales, que en los últimos tiempos han sufrido apreciaciones muy importantes. ¿Síntoma de recuperación o especulación pura?

En circunstancias normales, sin crisis a la vista, existen una serie de correlaciones entre mercados que suelen cumplirse: cuando sube la bolsa baja el precio de los bonos, cuando aumenta el apetito por los activos de riesgo los refugios como el oro sufren. Pero en los últimos años la situación ha sido muy poco normal. Y eso se nota en la pérdida de vigencia de algunas de esas correlaciones.

Una de las que se ha puesto en entredicho en varios momentos de 2009 y de este ejercicio, y especialmente en las sesiones más recientes, es la de que la apreciación del dólar hace caer a materias primas, y viceversa. Aunque es cierto que el dólar está lejos de sus mejores momentos históricos en sus principales cruces, los esfuerzos de recuperación más recientes de la moneda estadounidense han pasado casi sin rozar los abultados precios de los materiales básicos.

Éste es uno de los motivos en los que se apoyan los defensores de la teoría de la burbuja, la apreciación desmedida de algunas materias primas. En 2010, muchas de ellas han estado bajo sospecha (el trigo, el oro...), y ahora le toca al cobre.

¿Burbuja rojiza?

En el mercado de Londres, el cobre lleva varias semanas pulverizando sus máximos de 2008, año en el que se produjo un colapso de precios en este material que a posteriori fue tildado de burbuja, puesto que como se ha visto no estuvo apoyado por un crecimiento real de la demanda de este metal. Pero eso sí sucede ahora.

Uno de los principales motivos que inclinan la balanza del lado de la teoría de la recuperación económica es "la persistente demanda de China, principal consumidor a nivel mundial, que, a pesar de las restricciones desde el punto de vista de la política monetaria para mantener bajo control los crecientes precios, y de una moderación de las importaciones de cobre refinado respecto a 2009, se mantienen sobre niveles que reflejan una gran fortaleza", tal como explicaba Francisco López Ollé, analista de X-Trade, en una reciente tribuna publicada en elEconomista.es.

Incluso hay gurús de mercado que señalan que esta vez hay un motivo real tras la escalada del cobre. Como el polémico Jim Cramer, que ha afirmado en su programa Mad Money, de la CNBC, que "este movimiento es justo lo que parece. El producto del crecimiento global y la incapacidad de encontrar materiales básicos lo suficientemente rápido para cubrir las consistentes y persistentes exigencias de los mercados emergentes".

Confianza no exenta de prudencia

Lo peor de las burbujas de activos es que nunca se sabe con certeza que se han producido hasta que estallan. Por ello, la prudencia es una vez más la clave.

En Ecotrader pensamos que las materias primas siguen siendo un mercado muy fuerte y con una clara tendencia alcista, sobre todo en el caso de los metales industriales. De ahí que en las últimas semanas hayamos abierto estrategias sobre algunos como el zinc y el propio cobre, y sobre el PowerShares DB Base Metals, fondo cotizado que invierte en estos recursos.

Además, tenemos en vigilancia otras como el ganado, que por técnico está describiendo una "vela potencialmente alcista", tal como señalaron recientemente los expertos de Bolságora. O el azúcar, que ha llamado nuestra atención después de haber pulverizado máximos de 30 años.

Sin embargo, ninguna de las operativas que tenemos abiertas en este mercado tiene una recomendación de compra. Aconsejamos mantener porque, se geste o no una burbuja, por fundamentales hay pruebas de que efectivamente los precios pueden estar corriendo mucho.

Por ejemplo, si nos fijamos en las previsiones de precio para los principales recursos básicos del consenso de expertos que recoge Bloomberg (las puede consultar en nuestra sección de Materias Primas), vemos que para el cierre de 2011 prevén que el crudo cotice en los 84,5 dólares y el oro en los 1.400, cuando el primero está ya alrededor de los 93,5 dólares y el segundo en los 1.388.

Es decir, que han agotado ya (o están a punto de hacerlo) su potencial a medio plazo, y a menos que las previsiones sean revisadas al alza esto puede ser síntoma de que no cabe descartar correcciones en los precios. El tiempo, la economía y el mercado lo dirán.