Los buenos datos macroeconómicos en Estados Unidos favorecieron el alza del dólar, mientras que perjudicaron a los metales preciosos. El euro consiguió rebotar desde mínimos de 8 meses.
El dollar Index tocó su mayor nivel en más de un mes gracias al dato publicado durante la sesión en relación con las solicitudes de desempleo de Estados Unidos, las cuales fueron las mínimas en ocho años.
Después de que compareciera la presidenta de la Reserva Federal, Janet Yellen, hace unos días, informando de que una mejora del mercado laboral estadounidense podría suponer un adelanto del aumento de los tipos de interés, hay personas que piensan que la iniciativa puede estar ganando impulso y que la mejora de la economía está más cercana de lo que se cree.
Sin embargo, durante la sesión también se publicaron los datos de ventas de viviendas nuevas en Estados Unidos, y el resultado fue negativo: una caída 8,1% mensual, la cifra más baja desde marzo. Según fuentes de Bloomberg, "uno de los mayores retos de la vivienda es la escasez de la disponibilidad de crédito hipotecario", por lo que también hay razones para pensar que aún hay mucho camino que recorrer.
Aun así, el índice dólar de Bloomberg está en camino de su mayor avance desde enero y el billete verde se apreció un 0,43% frente al euro, un 0,6% frente al yen y un 0,7% frente a la libra.
Por otro lado estuvo el euro, que hoy avanzó posiciones después de caer ayer hasta mínimos de ocho meses después del crecimiento acelerado de la fabricación del mes de julio en la Eurozona, que fue inesperado y positivo al mismo tiempo.
La libra continuó con pérdidas por séptimo día consecutivo contra el dólar, ya que las ventas de minoristas del mes de junio en Reino Unido resultaron ser menor a lo que pronosticaban los expertos. Además, continúa la especulación de que el Banco de Inglaterra no va a elevar las tasas de interés a la velocidad que se esperaba. Al creerse que iba a ser el primer país occidental que lo hiciera, los inversores depositaron mucha confianza en la libra, y se apoya en el 11% que ha subido el último año.
La divisa más bajista del día fue el dólar neocelandés, o también llamado kiwi, que llega a la mayor bajada en nueve meses debido a las declaraciones del Banco Central de Nueva Zelanda, donde advirtió de la posibilidad de una caída significativa de la moneda. Durante la sesión llegó a perder al menos un 0,7% contra los 31 principales cruces de divisas.
En cuanto al mercado de materias primas continuamos con números negativos en nuestras estrategias. El West Texas -crudo de referencia en Estados Unidos- llegó a depreciarse un 0,65% al caer la demanda en 265.000 barriles diarios, el descenso más débil desde el pasado 6 de junio. Esta bajada de la demanda unida al aumento de los suministros de gasolina la semana pasada, que aumentaron en 217,9 millones de barriles, fue fundamental para que el crudo cayera. El Brent -crudo de referencia en Europa- también descendió hoy hasta un 0,77%.
En cuanto a la plata, se enmarcó en una jornada de optimismo al creer que la economía mundial realmente está mejorando. Los buenos resultados de las solicitudes de desempleo en Estados Unidos crearon un signo de fortaleza económica que animó a los inversores a reducir su demanda de los activos refugio, llegando hasta un descenso del 2,16%. El platino, a su vez, se depreció un 0,17% manteniéndose prácticamente plano.