Al cierre de la sesión lo más destacable ha sido ver como el IBEX 35 ha conseguido finalmente mantener en pie el soporte clave que presenta a la altura de los 9.715 puntos. De su mantenimiento depende que no vea confirmado un claro patrón de continuidad bajista que abriría la puerta a una profundización de la fase correctiva de las últimas semanas, alejando la posibilidad de que a corto pueda verse un rebote.
En este sentido, seguimos considerando altamente probable que en breve se forme un rebote. La alta sobreventa y la aproximación a soportes como son los mínimos de diciembre son argumentos que apoyan esta posibilidad. Este rebote, en cualquier caso, entendemos que será altamente vulnerable por lo que sería más una oportunidad para vender a precios mejores que para intentar aprovecharlo.