CAJAMADRID, JUICIOS YA

Y ahora lo que nos faltaba, Cajamadrid. Un escándalo tapa al anterior. Toda una población se siente completamente cansada de ver un todavía más. Millones gastados en poco tiempo por personas que teóricamente eran referentes en el mundo de la política, de la empresa, de los sindicatos. Da lo mismo el color del partido, del sindicato, del empresario. Mientras tanto al ministro de Economía se le “revuelve el estómago” en palabras suyas, por tanta corrupción y señala que las empresas del Ibex van a ser controladas. No hace falta más control, hace falta ser honrado, pero no controlado. Y, por supuesto, medidas rápidas para todos esos que han metido la mano en la caja, no esperar a que dentro de unos meses empiecen a pasar por los juzgados y se eternice en el tiempo y se diluya en el espacio. Los mismos que han hecho esas tropelías son los que defienden que el estado de derecho les ampara y que deben ser correctamente juzgados y nadie lo duda, pero el estado de derecho tiene que ser rápido y contundente y si no quizás mañana lleguemos tarde.

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