En el ecuador de la sesión lo más destacable es ver como la presión compradora mantiene el buen tono de ayer y pese a que no tiene la fuerza del martes pasado, día en el que finalmente los alcistas lograron revertir la situación bajista de las dos últimas semanas, podría ser suficiente para que podamos calificar la semana como alcista.
Para esto último es preciso que los índices acaben desplegando velas que en el argot técnico se conocen como penetrantes y para ello deben lograr cerrar por encima de lo que supone una recuperación del 50% del cuerpo real negro de la vela desplegada la semana pasada. Esto sería algo positivo y potencialmente alcista de cara la recta final del año. Estamos hablando que el IBEX 35 cierre por encima de los 8.400 y el EuroStoxx 50 por encima de 2.260 puntos.