Apple celebra este lunes su tradicional encuentro con los desarrolladores, conocido por sus siglas WWDC, considerado uno de los encuentros tecnológicos más esperados del año, ya que la compañía californiana acostumbra a anticipar la mayor parte de las novedades del año ante los ingenieros e informáticos afines a sus propuestas.
El foco de interés del público profesional, prensa especializada y seguidores de la marca promete apuntar a media docena de direcciones: anuncios en torno a los posibles dispositivos de realidad virtual; nuevos ordenadores y portátiles de la marca de la manzana; posible giro estratégico de la multinacional para abrazar la inteligencia artificial generativa; nuevas prestaciones de los sistemas operativos iOS 17, WatchOS, MacOs y tvOS; mejoras en los ecosistemas de hardware, software y servicios en asuntos de seguridad, privacidad y estandarización; y nuevas herramientas, recursos y prestaciones para las apps de los iPhones e iPads.
Pese a que el contenido del WWDC forma parte de los secretos mejor guardados de Apple, las filtraciones animan desde hace días este foro global, especialmente en la víspera de grandes anuncios. En espera de que Tim Cook, consejero delegado de Apple, inaugure la edición de este año y despeje todos los misterios, el sector confía en asistir en un cambio estratégico en la compañía más valiosa en bolsa del mundo, con una capitalización de 2,83 billones de dólares.
Realidad virtual. Los visores de realidad virtual tienen todo a su favor para ganarse un espacio en el escaparate de Apple. Con cierto retraso respecto a otros fabricantes, la propuesta de Apple promete dinamizar un segmento de mercado hasta ahora dominado por Meta. Fuentes del sector apuesta por un dispositivo cuyo aspecto se asemeja a unas gafas de esquí de travesía. El precio prevé oscilar entre los 2.000 euros y 3.000 euros y la calidad de reproducción de pantallas micro Oled de 1,41 pulgadas y resoluciones de 4K. El mismo gadget podría denominarse Apple Reality Pro y, entre otras cualidades, favorecerá el desarrollo de todo el ecosistema relacionado con el metaverso. Según Mark Gurman, analista de Bloomberg especializado en Apple, anticipa que dichos visores incorporarán múltiples sensores externos para el seguimiento de las manos, así como una tecnología capaz de interpretar el movimiento de los ojos detrás de las gafas.
Nuevos Mac. Pese a que la WWDC tradicionalmente centra su atención en el software y los diferentes sistemas operativos de Apple, la conferencia aprovecha la ocasión para presentar sus propuestas de ordenadores y portátiles, siempre hermanados con nuevos y potentes microprocesadores. En este caso, la industria apuesta por un Mac Air de 15 pulgadas equipado con el chip M2, el mismo que utilizan los modelos MacBook Air lanzados en 2022. Las especulaciones también apuntan a nuevos MacBook Pro de 13, MacBook Air de 13 pulgadas y un iMac de 24 pulgadas, todos ellos con el nuevo chip M3.
Inteligencia artificial. Apple siempre ha hecho excelentes migas con los algoritmos, con procesadores específicamente diseñados para gestionar este tipo de recursos. Sin embargo, el fenómeno de la IA generativa no ha encontrado en Cupertino el impulso que disfruta en Microsoft, Google y Amazon. Ahora está por ver de qué forma Apple se sube a un tren cada vez más en entredicho por motivos éticos y regulatorios.
Futuras actualizaciones. El WWDC permite conocer a los usuarios de Apple, con varios meses de antelación, las nuevas prestaciones de sus equipos. Parece fácil aventurar que la seguridad, la productividad, el entretenimiento y la salud serán prioridades de la compañía en las futuras actualizaciones de los sistemas operativos. También promete haber espacio para la creatividad de los desarrolladores relacionada con la realidad virtual, mixta y aumentada.
La cautela del 'gigante'
"Vísteme despacio que tengo prisa". Poco importa si la paternidad del proverbio corresponde a Carlos III o a Napoleón Bonaparte. También podría hacerla suya Apple. A lo largo de su historia, la compañía se ha mostrado cautelosa para evitar tropiezos con tecnologías poco maduras. Antes de incorporar el 5G, por ejemplo, la empresa se aseguró de que la super banda ancha respondería a las expectativas de los usuarios. Tampoco tuvo prisa en incorporar en sus porfolios de producto los auriculares inalámbricos o los altavoces inteligentes. Las tabletas ya existían mucho antes del iPad, sin que eso restará fuerza a Apple cuando apostó por esos formatos. Y algo parecido a lo anterior parece replicarse con la realidad virtual y la inteligencia artificial.