- 04/08/2020, 11:57
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Tue, 04 Aug 2020 11:57:58 +0200
El vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha querido "apuntarse un tanto a costa del caso" de las comisiones ilegales que cobraba la antigua Convergencia, el famoso 3%. Al menos, así lo consideran algunas fuentes en JxCat, la formación heredera del partido que dirigía Jordi Pujol. En concreto, les ha sentado mal el modo en que Aragonès abogó recientemente, en unas declaraciones públicas, sobre la necesidad de que la Generalitat se persone como parte acusadora en el inminente juicio oral en el que Pujol, y todo su clan, ocuparán el banquillo. El mensaje del político de Esquerra era, sin duda, esperado, y desde luego no ha sorprendido a sus socios de Gobierno. Sin embargo, lo que irrita en JxCat es, "una vez más", el hecho de que en "ERC no consultan nada", ni siquiera respecto a cuestiones tan delicadas para JxCat como ésta. "Poner a la Generalitat enfrente de Pujol es un paso con una gran carga simbólica, que nos marcará", reconoce un antiguo integrante de CiU, para quien "Esquerra solo piensa ya en las próximas elecciones y es aún menos de fiar que antes".