SALUD
- 29/04/2020, 08:37
29/04/2020, 08:37
Wed, 29 Apr 2020 08:37:42 +0200
Cada vez que alguien pronuncia o escribe la palabra desescalada, algún académico de la RAE se retuerce en su butaca. Pese a ello, los cuidadores del idioma no han tenido más remedio que aceptar a regañadientes un anglicismo del que nos acordaremos cada hora del día durante los próximos dos meses. En el mejor de los casos, y si nada se tuerce por el camino, a finales de junio concluirá la fase de la reducción de las medidas de emergencia derivadas de la crisis de la COVID-19, también conocido como desescalada (con perdón). Si seguimos portándonos bien, y si la evolución del virus mantiene la actual tendencia, nada impediría disfrutar de las playas este verano, con medidas de espacio personal. Por lo tanto, que desfile rápido esta primavera y llegue enseguida la canícula. Hasta el doctor Fernando Simón, responsable de la Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, concede cierta credibilidad a los que defienden las bondades del calor para frenar los contagios.