El Ministerio de Transición Ecológica ha aprobado un plan de emergencia para evitar un gran apagón en Formentera este verano. A partir del próximo 15 de mayo, la isla contará con un sistema de seguridad auxiliar que pueda evitar los cortes de luz en plena temporada alta para el turismo.
El posible gran apagón eléctrico ha vuelto a la primera plana europea, toda vez que la Comunidad de Madrid se ha pronunciado sobre la alerta que hace algo más de un mes levantó el Gobierno austriaco. A través de la presidenta, Isabel Díaz Ayuso, se ha desvelado que la capital cuenta con un plan específico en caso de emergencia que se insta a imitar en el resto de España.
La incesante subida del precio de la luz en los últimos meses ha desencadenado en que se pueda pensar que el mundo, con epicentro en Europa, podría estar al borde de sobrepasar sus límites energéticos. Esto provocaría un gran apagón que se extendería en el tiempo durante varios días, incluso semanas.
Mucho se está escribiendo sobre el posible apagón y los rumores, lejos de calmarse, disparan toda clase de teorías de la conspiración. Pero la realidad para muchas personas, concretamente para un 50% de la población española, es que esta situación de incertidumbre y desconfianza les genera un estrés al que contribuyen los consejos para sobrevivir a este mini-apocalipsis energético en rede sociales.
La Agencia para la Cooperación de Reguladores europea (Acer) ha asestado un fuerte varapalo a la propuesta presentada por España el pasado mes de octubre para reformar el mercado mayorista de la electricidad en Europa.
El coronavirus, Filomena, la erupción de la Palma... y ahora un apagón que dejaría a gran parte del mundo sin electricidad durante varios días. El mundo parece empecinado en chocar con un apocalipsis, para lo que las autoridades gubernamentales no dejan de buscar planes de cara a estar lo mejor prevenidos si esto llegase. Pero ante esta última teoría, conviene analizarla con precisión para saber qué probabilidad real habría de caos.
Austria y Alemania van muy en serio sobre el "peligro real" de que un gran apagón deje sin suministro eléctrico a la mayor parte de países europeos en un plazo de cinco año. "La cuestión no es si habrá un gran apagón, sino cuando", dijo la ministra de Defensa austriaca Klaudia Tanner hace unos días.
Llevamos unas cuantas semanas en los que el 'gran apagón' forma parte de nuestras conversaciones. Todo ha sido a raíz de que el Ministerio de Defensa de Austria pusiera un plazo de cinco años a este "peligro real". "La cuestión no es si habrá un gran apagón, sino cuando", remarcó la ministra austriaca Klaudia Tanner. La psicosis a esta situación, más propia de una película de ciencia ficción, ha hecho que se disparen las búsquedas sobre los kits de supervivencia.
La psicosis a un gran apagón eléctrico cada vez es mayor después de que hace unos días, el Ministerio de Defensa de Austria pusiera un plazo de cinco años a este "peligro real". "La cuestión no es si habrá un gran apagón, sino cuando", aseguró Klaudia Tanner, la ministra austriaca de Defensa. Aunque todo esto suene a película de ciencia ficción, lo cierto es que Europa se quedó al borde de sufrir un blackout el pasado 8 de enero.
Parece que las palabras de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, descartando un apagón eléctrico en España, no han calado en parte de la población. Ante la posibilidad de que esto ocurra, ya son muchos los que se están preparando adelantándose y comprando todo tipo de material de supervivencia, ya sean linternas, hornillos de gas, bombonas de butano o pilas entre los productos más demandados.
Los hornillos de gas se han convertido en el producto más codiciado por miedo a un gran apagón eléctrico, como ya ocurriera en la primavera de 2020 con el papel higiénico con la irrupción de la pandemia de coronavirus. Estos aparatos serían imprescindibles para poder comer caliente en el caso de que ocurriera esta situación.
Austria encendió todas las alarmas hace unos días al avisar del "peligro real" de un apagón masivo de electricidad en toda Europa fijando como fecha más cercana el año 2025. "La cuestión no es si habrá un gran apagón, sino cuándo", aseguró su ministra de Defensa Klaudia Tanner.
"La cuestión no es si habrá un gran apagón, sino cuándo". Son palabras de Klaudia Tanner, ministra de Defensa austriaca, sobre la posibilidad de que su país pueda sufrir un apagón eléctrico que afecte a todo tipo de servicios. Es una posibilidad, "un peligro real" que está subiendo enteros en Austria y que podría extenderse por toda Europa.
Parece que el Apocalipsis está cada vez más cerca, o por lo menos un gran apagón. El gobierno de Austria considera este peligro tan real que está preparando a su población para que sepa sobrevivir en caso de que se produzca un fallo en el suministro de la infraestructura eléctrica en Europa.