- 23/05/2022, 19:00
La Unión Europea aborda uno de los mayores desafíos en su historia: independizarse del gas ruso en tiempo récord y sobrevivir en el intento. Para lograr mantener su suministro energético antes de que llegue el invierno, Europa se ha encomendado a un ambicioso plan para asegurar un suministro alternativo. La base del plan es el reemplazo a través del GNL importado de Estados Unidos y otros países, una estrategia que al poco de haber arrancado ya se ha encontrado con importantes tropiezos.