- 08/12/2022, 06:00
A pesar de la recuperación turística, las aguas bajan revueltas en Hesperia. Después de dos años marcados por la pandemia, a la empresa presidida y controlada por José Antonio Castro se le abre un nuevo frente: la rebelión de sus accionistas minoritarios, las familias Olivella y Sagué, descontentas con la gestión del empresario gallego al frente de la hotelera. El enfrentamiento quedó patente en la última junta de accionistas, donde votaron contra las cuentas anuales y el informe de gestión pocos meses después de que la Sepi aprobase un rescate de 55 millones para la compañía.