Análisis
- 07/02/2021, 22:04
La desafección entre los ciudadanos y la política no es nada nuevo, traduciéndose en abstención en las citas con las urnas, pero en las elecciones al Parlament de Catalunya del próximo domingo 14 de febrero se le sumará el miedo al contagio de Covid-19, que también afectará a la propia constitución de las mesas electorales, hasta el punto de que ya se contempla tener que prolongar un día más los comicios para aquellas mesas electorales que no puedan ser constituidas el domingo por falta de integrantes -un cuarto de los citados han presentado recurso y se espera un elevado absentismo-, retrasándose también la publicación de resultados para evitar el voto táctico de los catalanes que voten más tarde según cómo fuese el recuento provisional.