La nutricionista Neus Elcacho, autora del libro La Dieta de las Emociones, asegura en una entrevista que "la comida ingerida tiene consecuencias psicológicas", hasta el punto de que "la dieta que siguen los trabajadores influye directamente en la rentabilidad de la empresa en la que trabajan".

Elcacho (Mollet del Vallès, Barcelona, 1989) ha creado recientemente, junto a la psicóloga y consultora emocional Natalia Pomar (Barcelona 1981), que durante 10 años ha sido directora de recursos humanos y formadora en gestión emocional para más de 100 instituciones, la empresa Healthy & Happy con el objetivo de ayudar a los equipos de trabajo a ser "más saludables y felices".
"Ahora no comemos sólo porque tenemos hambre, también lo hacemos para cubrir otras necesidades, como el dejar de estar aburrido, triste o enfadado"
La nutricionista catalana defiende el vínculo indiscutible entre alimentación y estado de ánimo y presenta "un nuevo método de actividades vivenciales y dinámicas" que, según señala, puede ayudar al bienestar de las empresas y favorecer su rendimiento.
¿Qué relación existe entre la alimentación y las emociones?
Los alimentos influyen directamente en cómo nos sentimos, porque inciden en las patologías y problemas de salud del sistema nervioso. Al digerir los alimentos, absorbemos nutrientes que ayudan a producir ciertas hormonas, si falla alguna de estas, como la serotonina, que es la de la felicidad, las otras también lo hacen porque están conectadas. Entonces dejamos de sentirnos bien.
¿Qué alimento puede ayudar a formar esta hormona?
Cualquiera rico en Omega 3, en vitaminas o en magnesio es esencial para producir la serotonina o las otras hormonas del sistema nervioso. Si nosotros comemos bien, nos sentiremos con más energía, concentrados, felices, ya que son nutrientes que incentivan las buenas emociones.
He leído una frase suya que decía: "Hoy en día los alimentos ya no son únicamente para sobrevivir".¿A qué se refiere?
Ahora no comemos sólo porque tenemos hambre, también lo hacemos para cubrir otras necesidades, como el dejar de estar aburrido, triste o enfadado.
Respecto a esto, ¿qué papel tiene cada alimento según nuestro estado anímico?
Inconscientemente, asociamos los alimentos a una emoción. Es muy interesante la memoria sensitiva, donde evocamos un alimento a un recuerdo de infancia o una película. Por ejemplo, cuando nacemos el primer gusto que notamos es el de la leche materna, que es dulce, un sabor al que le atribuiremos, más adelante, unas connotaciones emocionales: el mimo, el cariño o el bienestar.
¿Si estamos tristes qué tendemos a comer?
Genéticamente y como reflejo de supervivencia deseamos productos altos en grasa o con mucha azúcar, como un pastel. Para nosotros es un premio que nos reconforta psicológicamente, aunque a lo mejor no es lo que el cuerpo necesita.
¿Y qué debemos comer cuando estemos tensos?
Algo crujiente. El movimiento de la mandíbula hace que nos relajemos.
¿En que momento deciden relacionar la nutrición y la psicología con la empresa?
Fui la nutricionista de Natalia y ella mi psicóloga. Nos dimos cuenta de que ahora la demanda empresarial de actividades siempre es la misma: mejorar el bienestar del trabajador y el control del estrés. Además, este último es actualmente el motivo del 60 % de bajas laborales y España el país europeo con más casos de estrés laboral. Así que pensamos cómo podíamos ayudar.
Al final, una empresa lo que busca es ser productiva para ganar más dinero. Esto sólo se consigue si el trabajador se siente feliz, motivado y concentrado.
¿Y cómo ayuda Healthy & Happy?
Hacemos un team bulding (formaciones cortas) multidisciplinario, en el que ofrecemos a cada empresa diez actividades muy prácticas y vivenciales, de las cuales, después de analizar las necesidades de los trabajadores con la empresa, sólo elegimos dos.
¿Puede poner algún ejemplo?
Hay desde ejercicios de sensorialidad o mindfunless, hasta de creatividad, pero siempre con la nutrición y psicología como conexión y con una línea conductiva que los relaciona entre ellos. Como el concurso de cocina, divertido pero a la vez con diversas pruebas y disciplinas de carácter formativo.
Tanto el Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT) como la Organización Mundial de Salud (OMS) apuntan que las empresas que invierten en 'team buildings' de salud y nutrición, son más rentables. ¿Por qué?
Al final, una empresa lo que busca es ser productiva para ganar más dinero. Esto sólo se consigue si el trabajador se siente feliz, motivado y concentrado. Si apuestas por potenciar y fomentar la buena nutrición de tus empleados a través de formaciones o actividades dentro de la empresa, el resultado siempre será que obtendrás más rentabilidad.
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