Beberse un buen vino no solo depende del tipo de uva empleado en él o su color, hay muchos más condicionantes. Y uno de los factores más importantes aunque normalmente no se le dé valor entre los consumidores es su adecuada conservación. Por tanto, adquirir las vinotecas más sofisticadas del mercado es la solución si quieres disfrutar por completo de tu ritual de los viernes por la noche. Así de importante es su función:
El vino se puede alterar con mucha facilidad si no se almacena en perfectas condiciones. La estabilidad de la temperatura es un principio fundamental para su almacenamiento, para correcta la conservación del buqué y para garantizar una maduración estable. Las nuevas vinotecas que las marcas especializadas presentan este nuevo año, tras intensos periodos de I+D, ofrecen óptimos electrodomésticos para la conversación del vino en restaurantes, bares o incluso domicilios particulares.
La competencia en este terreno es elevada, pues muchas de las firmas consiguen con sus nuevas propuestas recrear a la perfección las condiciones de almacenamiento de las mejores bodegas de nuestro país, pero en elEconomista.es os proponemos al vinoteca de AEG por todo lo que ofrece. Te contamos:
La temperatura, clave para el vino
El innovador electrodoméstico de AEG cuenta con un diseño y funcionamiento de alta gama que, entre otras bondades, consigue mantener una óptima temperatura estable, ajustable entre 5 y 20°C, rango adecuado para servir el vino, o entre 12 y 14°C, la más ideal para guardarlos hasta que queramos degustarlos.
AEG sale al mercado con esta exclusiva vinoteca que cuenta con diferentes modelos, según necesidades o capacidades. Destaca especialmente el modelo Dual-Zone Pro está diseñado para mantener tanto los tintos como los blancos a la temperatura perfecta para beber. Este modelo cuenta con dos compartimentos independientes que se pueden ajustar individualmente para mantener los vinos a temperaturas óptimas para servir: entre 6 y 12 ºC para vinos blancos o espumosos, y entre 14 y 20 ºC, para los caldos tintos. Además, es posible configurar una zona entre 12 y 14ºC para conservarlos.
La humedad, la gran olvidada
El control de la humedad es también de vital importancia para la conservación del vino. La sequedad del ambiente puede provocar que el corcho se seque y encoja, permitiendo la entrada de aire en la botella -factor perjudicial para la conservación del vino-, generando oxidación y malos olores. Las vinotecas de AEG incorporan un Sistema de Reciclaje Automático de la humedad que garantiza el mantenimiento de sus niveles adecuados (50% o más). Un sistema que consiste en calentar el agua condensada por el proceso de refrigeración y que luego se introduce como aire húmedo dentro de la vinoteca.
Hay que protegerlo de la luz
Las nuevas vinotecas de AEG protegen el vino de la luz directa exterior que causa su oxidación y que puede desembocar en un cambio de color de cada caldo. Esta nueva gama monta puertas de cristal tintado que protegen de la luz y de los rayos UV, además de paneles interiores oscuros y luces LED atenuadas, lo que en su conjunto impide el envejecimiento prematuro del vino. Si consideramos también las vibraciones y los movimientos bruscos como factores que aceleran el envejecimiento y pueden afectar al equilibrio de cada tipo de vino, para proteger su calidad, las vinotecas incluyen un sistema antivibración que amortigua cualquier movimiento, evitando así la fatiga del vino.
Aire fresco, siempre
La circulación constante de aire fresco es vital para conservar las cualidades del vino. La estructura del mueble de nuestras vinotecas de envejecimiento premium incluye ventiladores internos y externos que garantizan un flujo de aire reticulado lento en todo el interior, evitando la aparición del moho que genera malos olores y supone el riesgo de deteriorar el corcho. Los modelos de mayor tamaño también incorporan un filtro de carbón activo que absorbe cualquier olor que penetre en el interior de la vinoteca.