Los vinos de Jerez son los vinos clásicos herederos de la tradición de Andalucía. Bodegas Tradición cumple a la perfección esa esencia de traer al siglo XXI los estilos, formas de crianza y embotellado de hace siglos. Un legado familiar que se remonta a 1650, una única bodega del Marco dedicada en exclusiva a vinos VOS y VORS certificados por el Consejo Regulador.
Fundada por Joaquín Rivero, apasionado del arte y del vino, traspasó esa emoción a su hija Helena, presidenta actual de la compañía, que constituye además un proyecto cultural único que engloba una pinacoteca, una colección fotográfica y un archivo documental, tres espacios integrados en el mismo casco de la bodega y capaces por sí mismos de explicar gran parte de su historia.
La vinculación de la familia Rivero con el vino se remonta a 1650 y se consolida en 1791 con un matrimonio que unió a dos de las familias más importantes en la producción y comercialización de Jerez, los Cabeza-Tixera y los Rivero, lo que provocó la refundación de la bodega bajo el nombre Rivero CZ.

Los vinos de esta bodega se han convertido en la puerta de entrada a un mundo exclusivo, sofisticado y hedonista. Caldos puros y naturales, sin clarificar ni estabilizar en frío, sin mezclas de color, de azúcares o de cualquier otra sustancia que pueda alterar sus atributos originales.
¿Cómo es el binomio entre familia y vino?
En mi caso, la familia y el vino están totalmente vinculados en todos los sentidos. Como empresa, como aprendizaje, como disfrute, la familia es eje de mi relación con el mundo del vino.
¿Cómo se consigue despuntar en el mercado en un momento tan competitivo para el sector?
Creo que pueden ayudar la diferenciación. Un proyecto con personalidad que de alguna manera aporte algo en este concurrido sector.
El continuo mimo de vuestro producto os ha llevado a obtener algunas de las puntuaciones más elevadas del mercado. ¿Cómo mimáis vuestras uvas?
En Jerez el cuidado del vino en la bodega es esencial. La viña es importante, pero es fundamental su selección, cuidado y conducción durante largas décadas en la bodega. En Tradición hemos rescatado la visión y las formas de trabajar de otra época, en la que la calidad era el primer objetivo, creo que por este vino está siendo tan valorado por los expertos.

¿Qué ofrecéis en vuestras visitas?
En nuestro caso, buscamos descubrirles el mundo de los vinos calificados de jerez. Nuestra bodega se dedica en exclusiva a estos vinos VORS Y VOS, los de más alta calificación que ofrece el consejo regulador, rarezas en sí mismas, y vinos de una bajísima capacidad de producción, con un escaso cupo, que además deben tener unas propiedades excepcionales a nivel organoléptico. Así que se ofrece una explicación del proceso de producción de este tipo de vinos de Jerez, una cata de esos vinos tan especiales, y además la visita a la colección de cuadros de pintura española que abarca desde los SXIV a XIX, y que alojamos en esta bodega. Un paseo por la historia de España a través de sus diferentes movimientos pictóricos, que ayudan a destacar la parte cultural del vino, además de disfrutarlo de una manera diferente.
¿Qué proyectos a corto plazo tenéis?
Nuestros proyectos son siempre a muy largo plazo. Muchos de los vinos que estamos comprando ahora no se beberán hasta dentro de 30 años . En Jerez todo lo vemos a largo plazo y sin prisas. Quizá el brandy sea el proyecto más inminente, y donde realmente creo que tenemos margen de cambio y más trabajo comercial por hacer.
¿Ser bodeguera en un mundo aparentemente de hombres cómo es?
No soy capaz de valorar como sería de otra manera, pero creo que la incorporación de la mujer en todos los ámbitos laborales no deja de ser un reto para hombres y mujeres, que también necesitamos de un tiempo de adaptación y afianzamiento.

¿La exclusividad que tiene vuestra bodega es la que ha derivado en su vocación de internacionalidad?
Por su dificultad de producción y su escasez son vino de precio alto, y por lo tanto internacionalmente hay mayor capacidad y hábito de gasto en vino.
Elegancia, educación, normalidad y respeto al prójimo han de ir de la mano has indicado en alguna ocasión ¿cómo se extrapola al mundo del vino?
En el mundo del vino el respeto viene cuando se tiene la oportunidad de conocer otras bodegas y sus bodegueros, a los sumilleres y conocedores del sector, a los clientes que finalmente son los que deciden lo que beben. Todo esto aporta una educación que permite valorar humildemente lo que uno hace bien o mal.
Durante años, los vinos de Jerez estuvieron denostados en España, ¿cómo es la situación ahora?
Actualmente existe una curiosidad por estos vinos, también en España, y nos sorprende entre la gente joven. Esperamos que no sea pasajera
¿Estos vinos tan especiales por su alta graduación y su propia esencia añeja cómo encajan en el mercado, esto es un handicap?
Para nosotros no. Esa larga crianza les dota, por concentración, de una complejidad y una intensidad de sabores que hace que estos vinos se beban en menor cantidad, a sorbos pequeños, y eso encaja con la tendencia actual de beber menos pero mejor. Estos alcoholes llevan años reposando y ensamblándose con el resto de los elementos, está integrado. No es lo mismo que un alcohol recién destilado, su proceso de metabolización es muy diferente.
¿Cómo se pueden modernizar estos vinos tan ligados al pasado?
No es nuestro objetivo. A nosotros en Tradición ese pasado nos parece esencial. En cuanto al consumo, ha cambiado tanto la gastronomía que estos vinos se adaptan bien porque han bailado ya en todos los salones.