Que el debut de Carlota Casiraghi en el desfile de Alta Costura de Chanel iba a acaparar todo el protagonismo, se sabía. Pero su entrada a caballo en la pasarela ha superado todas las expectativas.
Desde que Chanel nombrara embajadora de la firma a Carlota Casiraghi, a finales de 2019, su estreno en la pasarela era el momento más esperado. La presentación del fashion film de la colección, protagonizada por Carlota Casiraghi, una consumada amazona, adelantado hace unos días, ya dio alguna pista. Pero su entrada en la pasarela a caballo, enfundada en una chaqueta-joya de tweed y botones de pedrería, cerrando el desfile de la colección Primavera-Verano 2022, ha sido un golpe de efecto.
El Grand Palais Éphémère de París, sede habitual de los desfiles de la firma francesa, se convertía en un fastuoso espectáculo hípico sin precedentes en la historia de los desfiles de Alta Costura.
Por primera vez, la maison ha confiado en un artista contemporáneo, el escultor francés Xavier Veilhan, para "imaginar" la puesta en escena de un desfile. Como la propia firma adelantaba, "en un ambiente propicio para el asombro, este proyecto contribuye a hacer del desfile un momento de pura emoción estética, traduciendo la exclusividad y la búsqueda de la perfección de la Alta Costura".

Modelo y amazona
En el vídeo, la hija de Carolina de Mónaco exhibe sus dotes de amazona, entre composiciones geométricas, esculturas y obstáculos diseñados por Veilhan, autor del teaser y la decoración del desfile, que ha creado un universo visual que fusiona realidad y fantasía para representar la magia de la Alta Costura de Chanel.
En esta ocasión, la propuesta estrella del vestido de novia que tradicionalmente cierra los desfiles –en este desfile, vestido por la actriz Margaret Qualley–, se ha visto superado con creces con la aparición de Carlota Casiraghi a lomos de su caballo.
Eso sí, la moda de Virgine Viard brilló en el desfile, fiel a las esencial de Chanel, con sus (eternas) piezas de tweed cuajadas de botones-joya, la combinación (siempre perfecta) del blanco y el negro, y los toques (sofisticados) de plumas y lentejuelas.