Son varias leyendas las que nos trasladan al momento en el que el croissant comenzó a formar parte de nuestra vida gastronómica. Aunque no se sepa con exactitud, el cruasán tiene un antecesor, que independientemente de la historia, nace en Viena. Hoy en día lo único que los une, es su forma de media luna, pero no en su composición. Fue en 1839 cuando se introdujo en Francia, y para 1863 la palabra croissant ya formaba parte del diccionario de la lengua francesa (obra más conocida como el Littré). Aunque la receta ha ido variando desde entonces, el croissant hoy en día es conocido como un alimento típico francés. Desde Status elegimos los mejores croissants de España para celebrar el Día Internacional del Croissant.

La Duquesita, situado en la calle Fernando VI desde 1914, es un must de la capital. Aquí conviven los sabores tradicionales, los postres de temporada, los dulces artesanales, las nuevas creaciones y una amplia propuesta de bombones y chocolates. El croissant es uno de sus productos estrella.

Manolo Bakes, una tentación difícil de resistir.

Panem, aunque lleve poco más de dos años, se ha consolidado como uno de los puntos de referencia de la capital. Son cinco hermanos y el año pasado consiguieron el premio al Mejor pan de Madrid 2019, concurso organizado por el Club Matador.

Ciento treinta grados, su delicioso croissant a 1,70€, se encuentra en el barrio de Chamberí. Hasta ellos mismos dicen que "el paraíso tiene forma de croissant", por algo será.

Brunells Barcelona, sigue en la misma esquina desde 1852. A día de hoy, una de las pastelerías más antiguas de la ciudad. Su especialidad, el croissant, tanto es así que ganó el Concurso Mejor Croissant Artesano de Mantequilla de España 2020.

Pastelería Suiza Bilbao. Desde que abrieron han mantenido sus recetas tradicionales, y debe ser por esto mismo que está considerado como uno de los mejores croissants de Bilbao.

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