Cuando buscamos un resort para disfrutar de un merecido descanso son diversas las cuestiones a valorar para elegir el que mejor se adapte a nuestras necesidades. Es importante la oferta de relajación, pero también el entretenimiento, la gastronomía y todas las experiencias que puedan hacer de nuestro paso por ese complejo una experiencia realmente memorable.
En este sentido, hay un refinamiento que no todos los hoteles, por muy exclusivos que sean, pueden ofrecer, y es el hecho de ser propiedad de una 'celebrity', ya sea del mundo de la moda, el espectáculo o sobre todo el cine, dado que son estos últimos los que han demostrado estar más interesados en invertir en este tipo de proyectos.
Por si andas buscando destino para tu próxima escapada, aquí te apuntamos cinco alternativas realmente especiales. Eso sí, no te olvides de reservar con (mucha) antelación.
Turtle Inn (Belice)

Hace tiempo que el director ganador del Oscar Francis Ford Coppola bajó su ritmo de trabajo para la gran pantalla, aunque sus cuentas no han dejado de engordar. Una de sus principales fuentes de ingresos es su premiada cadena de hoteles, expandida por todo el mundo, The Family Coppola Hideaways, todos con un diseño y propuesta personalizados. De entre todos ellos destaca el muy exclusivo Turtle Inn, en Belice, muy próximo al arrecife de coral declarado Patrimonio Mundial por la Unesco, el más grande del hemisferio occidental.
Un ambiente rústico balinés preside el diseño de este complejo del Caribe, incluidas villas y cabañas individuales con techo de paja. Aunque también tenemos la posibilidad de alquilar Coral Caye, su propia isla privada. Como no podía ser menos tratándose de Coppola, los restaurantes del resort comparten una amplia y muy completa bodega de la que también pueden disfrutar los clientes en cualquier momento de su estancia.
Palazzo Versace Dubai (Emiratos Árabes) y Palazzo Versace Gold Coast (Australia)

Continuamos con otro personaje 'productivo' en este ámbito hostelero, dado que la diseñadora de moda Donatella Versace, hermana del fallecido y añorado Gianni Versace, no posee uno sino dos resorts espectaculares, uno en Dubai y otro en Australia. Ambos Palazzos Versace son establecimientos de auténtico lujo que juegan con el peculiar entorno en el que están ubicados pero sin perder un ápice de la exquisitez del palazzo original.
El primero cuenta con ocho restaurantes y un exótico jardín, además de 215 habitaciones y suites y 169 residencias, todas con un diseño revisado personalmente por Versace. Por su parte, el palazzo australiano presenta un diseño similar, aunque en este caso hay una mayor oferta de cuidado y bienestar, además de un puerto deportivo privado.
Muscha Cay (Bahamas)

Si estamos buscando una estancia mágica, pocas alternativas más apropiadas que acudir al resort propiedad de uno de los magos más populares del planeta. Hablamos de David Copperfield y su Musha Cay, complejo levantado en unas islas de Las Bahamas que también pertenecen al ilusionista. Tanta exclusividad en este rincón tropical no podría salir barato, y hablamos de 42.000 dólares la noche, con una estancia mínima de cinco días.
Hay que entender que el alquiler del hotel y la isla es exclusivo, y se aceptan grupos de hasta 24 personas para disfrutar de un total de 11 islas con 40 playas de la más fina arena a su disposición. Entre las propuestas de Musha Cay encontramos las más diversas posibilidades deportivas de mar y tierra o jugar unas partidas de billar en una mesa que perteneció al mismísimo Harry Houdini.
Gwiganna Health Retreat (Australia)

Cuentan que Hugh Jackman se pegaba tales palizas para prepararse físicamente para su papel en Wolverine, que su estancia en el retiro de salud y bienestar de Gwinganna, en la Costa Dorada de Australia, le supo a gloria. Se enamoró tanto del lugar y del complejo que decidió convertirse en copropietario.
Este santuario de spa y eco-retiro es el más grande del hemisferio sur, con 33 salas de tratamiento, arquitectura ambientalmente sensible y niveles expertos de servicio y cuidado; no en vano ha recibido toda clase de premios por el nivel de cuidado en su diseño y servicios.
La oferta gastronómica es tan variada y saludable como la de bienestar, libre de gluten y lácteos. Además, hay dos piscinas climatizadas de borde infinito, un centro de entrenamiento personal, canchas de tenis y todo tipo de actividades al aire libre en la naturaleza.
Nobu Ryokan (Malibú, California)

Esto va más allá de un mero complejo de lujo. Aunque Robert De Niro ya había entrado en el negocio de los hoteles en 2008 cuando abrió The Greenwich Hotel en Manhattan, su gran apuesta llegó de la mano de unos socios de lujo, el chef Nobu Matsuhisa y el productor Meir Teper. Juntos han levantado un pequeño imperio de exclusividad a través de 13 centros Nobu Hotel por medio mundo y otros cinco previstos para los próximos meses.
De todos ellos, tal vez el más representativo sea el Nobu Ryokan, en Malibu, encarnación de ese lujo moderno, relajado y genuinamente japonés que caracteriza a la cadena. El establecimiento se levanta en la célebre Billionaire Beach, en la costa californiana, donde los huéspedes pueden encontrar desde tatamis a bañeras de teca hechas a mano bajo los tragaluces de su habitación, algunas de las cuales cuentan con su propio jardín zen. No relajarse en este lugar es poco menos que imposible.