Rusia
Dos jóvenes de 17 y 20 años, las 'viudas negras' del metro de Moscú
Las dos terroristas suicidas que el pasado lunes se hicieron explotar en el metro de Moscú eran viudas de jefes guerrilleros del Cáucaso abatidos por agentes de seguridad, según fuentes de la investigación que cita hoy la prensa rusa.
Las dos mujeres han sido identificadas de forma preliminar como Dzhennet Abdurakhamanova, de 17 años, y oriunda de la república caucásica de Daguestán, y Marja Ustarjánova, chechena de 20 años.
El periódico publica una fotografía de Abdurajmanova, con cara aniñada y un pañuelo islámico en la cabeza, junto a Magomedov. Ambos posan con pistolas.
No está claro si la pareja se casó formalmente. Magomedov, muerto en una operación especial el 31 de diciembre de 2009, no lleva anillo en la fotografía.
Kommersant añade que es posible que la mujer tenga otro apellido: Abdulayev.
Abdurajmanova viene del distrito de Jasavyurtovsky, en la república caucásica rusa de Daguestán, y conoció a Magomedov a los 16 años tras ponerse en contacto con rebeldes en Internet, sostiene Kommersant, según el cual su identificación preliminar se hizo a partir de fotografías.
El comité ruso de investigación atribuye a Abdurajmanova la primera de las dos explosiones suicidas que el lunes mataron a 39 personas y dejaron Rusia bajo una fuerte conmoción.
Estos ataques traen a la memoria los perpetrados años antes por las llamadas "viudas negras", familiares todas ellas de hombres muertos en operaciones de las fuerzas rusas.
"Nos encontraremos en el cielo"
La investigación considera que ambas kamikazes llegaron a Moscú en un autocar interurbano desde la ciudad daguestaní de Kizliar, la misma donde dos días después las explosiones de Moscú otro doble atentado suicida, esta vez perpetrado por hombres, causó once muertos y casi 30 heridos.
Según fuentes del diario 'Moskovski Komsomolets', una de las terroristas llevaba encima una carta de amor escrita en árabe que terminaba con la frase: "Nos volveremos a encontrar en los cielos".
A su vez, uno de los dos hombres que se hicieron explotar en Kizliar fue identificado como Daúd Magomédov, de 21 años, conocido por la policía como seguidor del wahabismo, una corriente radical del islam profesada por la guerrilla separatista del Cáucaso ruso.
Según fuentes de la investigación, se supone que ese hombre podría ser oriundo de la ciudad de Volgogrado, al igual que otro terrorista buscado, el ruso Pável Kosolápov, también wahabí profeso.