
"Lo que me importa es saber que los aciertos o errores que cometamos influyen directamente en la vida de muchas personas". Estas palabras de Ana Botella en una entrevista concedida a una publicación de moda hace casi un mes cobran especial relevancia en un momento donde la tragedia del Madrid Arena se ha convertido en su espada de Damocles.
La búsqueda de la "tranquilidad y acertar con su gestión" es el objetivo que Botella persigue en su nueva andadura política, confiesa a Telva. Una calma que no conseguirá hasta que "no se depuren las responsabilidades" de trágica desgracia con tintes de escándalo político que ha acabado con la vida de cuatro jóvenes y que le ha costado el puesto al concejal de Economía y responsable del Madrid Espacios y Congresos, Pedro Calvo.
Ana Botella, la mayor de trece hermanos, licenciada en derecho y funcionaria del cuerpo de administradores civiles del Estado desde 1975 confiesa que la alcaldía de Madrid ha colmado "sus ambiciones políticas". Un terreno que describe "muy diferente al del año 96" cuando José María Aznar fue elegido presidente del Gobierno. "También heredamos un altísimo índice de paro, porque los socialistas son una fábrica de hacer parados, pero ahora, además, tenemos una crisis institucional que antes no existía", explica Botella.
El sueño olímpico
Una de las batallas más importantes para la alcaldesa son los Juegos Olímpicos. Un sueño compartido por su antecesor, Alberto Ruíz Gallardón con el que trabajó codo con codo desde la Consejería de Medio Ambiente. Una etapa marcada por el elevado gasto público en infraestructuras que ha conducido a la asfixia de las cuentas públicas. Botella aunque reconoce que el dispendio era necesaria hace autocrítica. "todos cometimos el error de pensar que los ingresos que había entonces iban a sera sí para siempre".
En su vida privada "su marido es la persona más importante". Con él lleva 35 años de matrimonio. "Desde entonces, hemos tenido una vida muy intensa y nos
hemos reinventado muchas veces", hasta el punto que "mi marido todavía no tenía trabajo, y la que mantendría la familia sería yo".