Al menos 23 personas han muerto este martes, entre ellas dos mujeres y cuatro niños, a manos de las fuerzas de seguridad sirias, que continuan su ofensiva sobre la ciudad de Homs, donde desde el viernes pasado se han registrado ya varios cientos de muertos, según han informado los Comités de Coordinación Local.
De acuerdo con este grupo activista que coordina las protestas contra el régimen de Bashar al Assad, del total de fallecidos a lo largo de la jornada, trece han muerto en Homs, otros seis en Madaya, un suburbio de Damasco, dos en Idlib (norte), uno en Alepo (oeste) y otro en Deraa (sur).
"No hay electricidad y todas las comunicaciones con el barrio han sido cortadas"
Según activistas opositores consultados por Reuters, las fuerzas gubernamentales han reanudado este martes el bombardeo de la ciudad de Homs, matando a otras 19 personas e hiriendo a 40. Un aumento de la cifra de fallecidos después de que las operaciones dejaran ayer al menos 95 muertos y desde el viernes pasado algo más de 300.
"El bombardeo se está concentrando nuevamente en (el distrito de) Baba Amro", ha señalado Mohamad al Hassan, un activista en Homs, en declaraciones a Reuters por teléfono vía satélite. "No hay electricidad y todas las comunicaciones con el barrio han sido cortadas", ha precisado.
Según Reuters, también hay informaciones procedentes de residentes de ataques de artillería. Estas dicen que a pesar de todo, los enfrentamientos entre fuerzas gubernamentales y rebeldes en Hama, otra de las ciudades que ha registrado multitudinarias protestas contra Al Assad, no paran.
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