Barcelona, 15 jun (EFE).- El estilista Lluis Llongueras, acompañado de su hermano Enrique, ha donado hoy al Museo de la Indumentaria de Barcelona un vestido diseñado por su padre, Antoni Llongueras, un prestigioso modisto de renombre en la ciudad condal entre las décadas de los cuarenta y los sesenta.
Una modelo ha exhibido esta valiosa pieza, un vestido de seda salvaje, mate, abotonado por delante con botones forrados de la misma tela y totalmente revestido de blonda negra, de un original color entre azul y malva.
De línea evasé, acampanado y con cola posterior, este diseño de los años cincuenta vuelve a estar de moda gracias al auge del estilo "vintage", tan en boga hoy en día para cualquier evento social.
Antoni Llongueras (Esparreguera -Barcelona-, 1908) se trasladó a Barcelona en 1942 para trabajar como modisto, pero fue diez años más tarde cuando abrió un taller en plena Gran Vía, en donde llegó a tener hasta doce modistas a su servicio.
Cuando sus clientas le encargaban vestidos de fiesta para estrenar en el Gran Teatro del Liceo, el modisto se los entregaba a domicilio y él mismo peinaba a sus clientas con elegantísimos recogidos.
En 1972, influenciado por su hijo Lluis Llongueras, el modista se reconvirtió en peluquero y se transformó en un creativo, preocupado en el conjunto de la imagen de la mujer.
Con esta donación, el Museo de la Indumentaria de Barcelona ya tiene tres obras catalogadas del modisto catalán.