ALTAGRACIA DE ORITUCO, Venezuela (Reuters) - Decenas de personas, entre ellos una mujer embarazada y un recién nacido, permanecían el martes por segundo día como rehenes en un banco de una ciudad en el interior de Venezuela, mientras continúan las negociaciones con los captores.
El ministro del Interior, Ramón Rodríguez Chacín, se desplazó hasta Altagracia de Orituco, en el norte del central estado Guárico, donde aseguró a periodistas que serían en torno a 30 los retenidos en la sucursal del Banco Provincial, filial de español BBVA, en esta pequeña localidad de unos 60.000 habitantes.
"Tienen que entregarse (...) si les damos las facilidades para que huyan, más riesgo tienen sus vidas (...) No podemos permitirlo, eso es mayor riesgo para los tres, cuatro o cinco rehenes que se vayan a llevar", dijo Chacín.
"Yo creo que ojalá esta tarde o mañana tengamos resuelta de forma definitiva la situación. Veo de parte de los secuestradores que han aflojado un poco las cosas", dijo Orlando Zambrano, secretario del estado Guárico, al canal estatal VTV.
Cerca de las 10.00 hora local (1430 GMT) del lunes, tras un frustrado intento de atracar la sucursal, los asaltantes tomaron como rehenes a empleados y clientes, entre los que se encuentran una mujer embarazada de ocho meses y un bebe de dos semanas de vida, además de otros niños, según cautivos.
"Estos muchachos ni han comido, nos dieron toda la comida a nosotros y se han portado a la altura. Ellos tienen un plan para irse, pero sin lastimar a nadie", dijo Jeancarlos Gil, de 19 años, quien habló cerca de uno de los secuestradores.
El presidente ejecutivo del BBVA Banco Provincial, León Cottin, afirmó en entrevista con Globovisión que, según lo que recogieron las cámaras de seguridad de la oficina, hay cuatro asaltantes y 28 clientes de la institución.