
Bruselas, 3 mar (EFE).- El comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, destacó hoy los riesgos para la estabilidad económica y financiera de algunos países de Europa central y del este, pero dejó claro que no tiene sentido un plan de rescate para toda la región.
"La situación debe analizarse caso por caso", subrayó Almunia en una conferencia, dadas las grandes diferencias en la situación de los distintos países.
Recalcó, en ese contexto, que la petición del Gobierno húngaro para que la UE ofrezca un paquete de ayuda a la región de entre 160.000 y 190.000 millones de euros fue rechazada, en primer lugar, por varios de sus países vecinos, que niegan que necesiten ese tipo de ayuda.
Varias de las economías de Europa central y del este, miembros de la UE pero también países candidatos o simplemente vecinos, figuran entre las más golpeadas por la crisis económica y financiera, que ha cortado bruscamente los flujos de financiación extranjera que sustentaban hasta ahora su crecimiento.
En el caso de los países cuyas divisas flotan libremente, están siendo castigados con fuertes depreciaciones.
El comisario reconoció que, dado que muchos de los créditos en estos Estados, tanto a empresas como a particulares, están contratados en moneda extranjera, la depreciación genera riesgos importantes para la estabilidad macroeconómica.
A ello se une la delicada situación de los bancos, en su mayoría filiales de entidades de Europa occidental (sobre todo de Austria, Italia, Bélgica, Holanda y los países escandinavos).
La UE ya ha ofrecido sendos créditos para ayudar a solventar el elevado desequilibrio exterior a Hungría y Letonia, por 6.500 y 3.100 millones de euros, respectivamente, junto a otras instituciones, principalmente el Fondo Monetario Internacional (FMI), que también han aportado fondos.
Asimismo, el Banco Europeo de Inversiones, el Banco Mundial y el Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo ya anunciaron la semana pasada una ayuda de 24.500 millones de euros para estabilizar a las entidades de la región.
Almunia dejó claro hoy que el apoyo a estas entidades debe hacerse mediante la recapitalización de sus matrices, pero admitió que no hay ninguna garantía de que los fondos sean repartidos de manera justa.
Preguntado por la situación específica de Ucrania, el comisario dijo que el desequilibrio de este país es muy elevado, pero precisó que, a pesar de su importancia política y económica para los Veintisiee, la UE tiene pocas herramientas para ayudarle.
Explicó que la responsabilidad en este caso es principalmente del FMI, pero señaló que este organismo está encontrando serios problemas en su negociación con las autoridades ucranianas.