Bolsa, mercados y cotizaciones
Draghi ve señales de estabilización y el efecto positivo de la liquidez
En la rueda de prensa tras la reunión en la que el consejo de gobierno decidió por unanimidad mantener los tipos de interés en el 1 %, Draghi dijo que las tensiones en los mercados financieros lastran la actividad económica en la zona del euro, si bien " de acuerdo a algunos indicadores recientes hay signos provisionales de una estabilización en la actividad económica a bajos niveles".
El euro subió y superó los 1,28 dólares tras las declaraciones del presidente del BCE y también impulsado por el éxito de las emisiones de deuda de España e Italia con las que se han refinanciado sin problemas.
"Las perspectivas sigue sujetas a una elevada incertidumbre y sustanciales riesgos a la baja", continuó Draghi.
Por ello el presidente del BCE mantuvo la cautela y no descartó la posibilidad de bajar más los tipos de interés en caso de que empeore la situación.
"La inflación debe estar en línea con la estabilidad de precios a medio plazo", dijo Draghi.
El BCE prevé que la inflación se situará por encima del 2 % en los próximos meses y que después caerá por debajo de este nivel, que es el objetivo que la entidad establece para garantizar la estabilidad de precios.
Draghi añadió que "la política monetaria es y seguirá siendo expansiva", lo que quiere decir que los tipos de interés seguirán a un nivel bajo para estimular la actividad económica.
Pero, "la incertidumbre es muy elevada" y "estamos preparados para actuar", por lo que podrían bajar más las tasas.
A diferencia de otros bancos centrales, hasta ahora, el BCE ha rehusado recortar el precio del dinero por debajo del 1 %.
El Banco de Inglaterra mantuvo hoy en el mínimo histórico del 0,5 %, los tipos de interés en el Reino Unido.
En EEUU y en Japón los tipos de interés también se sitúan algo por encima del 0 %.
Además, Draghi destacó los efectos positivos en la economía de la zona del euro derivados de la inyección de liquidez a tres años que la entidad acometió a finales de diciembre.
"Este dinero circula en la economía y no sólo está en la facilidad de depósito del BCE", dijo Draghi.
Añadió que los bancos que han tomado prestado dinero del BCE no son los mismos que han depositado la liquidez en la entidad monetaria.
Los depósitos a un día de los bancos en el BCE encadenaron hasta el 10 de enero cuatro máximos consecutivos pero ayer descendieron hasta 470.632 millones de euros (485.898 millones de euros el 10 de enero).
En este sentido, Draghi explicó que se ha reabierto algo el mercado de bonos bancarios no garantizados pero que el mercado interbancario todavía no funciona y que es el comienzo del proceso de recuperación.
También han bajado los tipos de interés notablemente, inicialmente a corto plazo pero ahora también a medio y largo plazo.
Draghi dejó entrever que el BCE va a seguir comprando deuda soberana de los países de la zona del euro que tienen dificultades de refinanciación pese al éxito de la inyección de liquidez a tres años.
El objetivo del BCE es que todos los bancos de la zona del euro accedan a la liquidez y faciliten créditos a las empresas y los hogares.
Algunos expertos consideran que el BCE va a llevar a cabo en el futuro una línea más pragmática y no tan dogmática como hasta ahora, influida por el peso que tenían algunos alemanes, más defensores de una política monetaria ortodoxa.
Jürgen Stark y Axel Weber han sido sustituidos por una generación más joven.
Draghi renunció pronunciarse sobre si España debe mantener un representante en el comité ejecutivo del BCE, cargo que ocupa actualmente José Manuel González-Páramo y que vence el 31 de mayo.