El alza de las materias primas, la semana pasada, podría ser un primer paso para una recuperación en serio. Si fuera el caso, no nos gustaría dejar de ser parte de la fiesta. Si nos han seguido, sabrán que en agosto y septiembre éramos muy pesimistas para el corto plazo en el sector de materias primas. Considerábamos además que una caída rápida y fuerte hacia niveles de soporte clave a medio plazo era el camino más conveniente para no comprometer la tendencia alcista de las materias primas en el medio y largo plazo. Apuntábamos hacia niveles de los 300 puntos psicológicos del índice americano CRB, en concreto más hacia los 295, porque alcanzarlos suponía corregir el 38,2 por ciento del alza mantenida desde 2002 y el 50 por ciento del movimiento desde 2003. Así fue. Por lo tanto, han coincidido en dicho nivel dos soportes muy relevantes marcados por la teoría de la onda de Elliott. No nos sorprende nada que esta zona sea aprovechada para desplegar una figura de vuelta alcista, con una primera muestra la semana pasada. Cabe recordar que puede producirse una subida mucho más importante porque el sector de materias primas es aquel en el que la mayoría de los activos se han quedado al margen de la recuperación y ofrece por ello la posibilidad de una incorporación a la tendencia alcista. Superar los 315 puntos del índice CRB y los 607 dólares en el caso del oro al contado, marcaría una señal potente de compra para los inversores que buscan estrategias alternativas a unos índices susceptibles de perder fuelle en el corto plazo.