Indefenso. Así se siente el mercado ante la idea de que los bancos centrales comiencen a retirar las políticas de expansión de los últimos años. A la inversa, los últimos días han dejado constancia de que el comportamiento de los inversores es dependiente de qué digan o hagan las autoridades monetarias. Las subidas de los activos de riesgo, han encontrado soporte en la nueva inyección del PBoC, la opción de que la Fed no suba tipos en septiembre y en declaraciones sobre ampliar el QE en Europa si es necesario.