El mayor surtido bursátil de alimentación es ya el de SOS Cuétara. Tanto, que en las dos últimas sesiones la compañía que preside Jesús Salazar ha alcanzado el estrellato al superar a Ebro Puleva en capitalización bursátil. Lo ha hecho por primera vez en su historia y esto tiene tiene una trascendencia mayor: Se ha convertido en la empresa de alimentación española cotizada que más vale en bolsa. En concreto, y según cifras del cierre de ayer, vale 1.832 millones de euros. Nada es casualidad. Su evolución durante el año pasado en el parqué español ha sido ejemplar en comparación con otras empresas de su sector. SOS Cuétara ha sabido capear los malos temporales vividos en 2007 y, aunque el precio de su acción ha caído, ha logrado mantenerlo cerca de su máximo histórico (15,40 euros), ya que ayer cerró a 13,35 euros. Y aunque odiosas, las comparaciones son certeras: Ebro cerró ayer a 11,91 euros, lo que significa que sus títulos están a niveles de 2005 y muy lejos del máximo histórico que alcanzó a finales de 2006, cuando marcó 19,59 euros. ¿Cuál es entonces el secreto de supervivencia de SOS Cuétara? Sin duda, el aceite de oliva, uno de los productos más preciados. Y SOS es dueño de Carbonell, la marca más vendida del mundo, y de enseñas italianas como Minerva y Carapelli, con una fuerte presencia en Estados Unidos. Allí, además, es propietario de American Rice. Y suma y sigue. Lo dicen los expertos del mercado: ser fuerte en el extranjero está penalizando menos a las empresas españolas. Ante la caída del consumo en nuestro país, lo mejor es tomar posiciones más allá de nuestras fronteras.